Bilbao - A Coruña es un campo de regatas exigente, que no permite errores y acostumbra a coronar a las traineras más fuertes de la competición. Escenario habituado a ser pista de despegue para muchos equipos que aspiran a conquistar el título final. Orio volvió de aguas gallegas con un buen botín, con dos puntos más de ventaja sobre Arraun Lagunak y con el añadido de confianza que da haber logrado el triunfo de una manera tan contundente. Las oriotarras no tuvieron rival. En la primera jornada dejaron viva la emoción por la bandera al ganar con solo cinco segundos, pero ayer no tuvieron la necesidad de utilizar la calculadora y sentenciaron la regata desde las primeras paladas, para ganar con una diferencia cercana a los veinte segundos. Su mayor rival en la Liga Euskotren, Arraun Lagunak, tuvo un día para olvidar y cerca estuvo de ver como perdía la segunda posición por primera vez en este curso.

Orio acabó con toda especulación en la txanpa inicial. Sentenció la bandera antes de llegar al primer largo. Las condiciones del campo de regatas exigieron una remada técnica, pero sobre todo fue necesaria una gran capacidad para generar vatios y enfrentarse así al duro viento en contra. Las oriotarras tuvieron una fortaleza superior a todas sus rivales. Para la mitad del primer largo, la distancia ya era superior a los cinco segundos y las otras tres embarcaciones bogaron a la par. Arraun Lagunak fue el que peor se adaptó a este nuevo escenario. Las donostiarras estuvieron muy por debajo de su nivel habitual y pasaron a luchar por evitar el último puesto. Hondarribia y Donostiarra comenzaron peor y la amenaza de sufrir una debacle pendió sobre Arraun Lagunak.

La proa de la regata estuvo lejos de cambiar en el largo de vuelta. Orio no varió el ritmo y con la distancia conseguida tuvo todo el campo de regatas a su alcance para negociar el rumbo que consideró más apropiado. La distancia no paró de subir y en popare tampoco tuvo que preocuparse. Encadenó notablemente varias olas y no bajó el ritmo para ganar con tranquilidad. Fue un triunfo sencillo, pero que provocó mucha emoción en las tostas oriotarras, con evidentes síntomas de alegría tanto dentro de la trainera como entre las suplentes.

Con la bandera asignada para Orio, el objetivo de Arraun Lagunak fue recuperar las posiciones perdidas y volver a ser segundo. Las remeras de la Lugañene sufrieron mucho en el largo de ida. El arranque no es uno de sus puntos fuertes, pero ayer el viento les castigó duramente y se vieron inmersas en una pelea contra rivales que no acostumbran. Los metros finales también perjudicaron a Hondarribia y Arraun Lagunak pudo rebasar a las fronterizas antes de la primera ciaboga.

El siguiente rival a batir fue Donostiarra. Las patroneadas por Inder Paredes fueron por delante de sus vecinas hasta llegar a la ciaboga. Sin embargo, no acertaron a la hora de realizar la maniobra y Arraun Lagunak aprovechó para colarse por delante. Ya en un puesto que les ofreció más tranquilidad, los nervios empezaron a disminuir. La Lugañene aprovechó sus buenas dotes a la hora de remar en popare para afianzarse en la segunda posición y salvar un día que había comenzado con previsiones de convertirse en pesadilla.

1. Orio10:16

2. Arraun Lag. a 19”

3. Donostiarraa 26”

4. Hondarribia a 27”

1. Orio15

2. Arraun Lag. 13

3. Donostiarra 7

4. Hondarribia 5