Bilbao y su museo Guggenheim han sido, durante años, prácticamente el único reclamo turístico del territorio. Miles y miles de visitantes se acercan al gigante de titanio que representa, como nadie, el resurgir de una ciudad que supo reinventarse desde su pasado industrial. Pero ese ciclo parece haber tocado a su fin. Pese a seguir manteniéndose como indudable cabeza de cartel de cualquier visita a Bizkaia, cada vez son más los turistas que caen rendidos al resto de atractivos del territorio. Actualmente, ocho de cada diez viajeros visita Bilbao y al menos una comarca más, principalmente de la zona costera, pero también la Bizkaia más rural e interior está sacando la cabeza.
La Diputación desembarcó ayer en Fitur, la Feria Internacional de Turismo que se celebra en Madrid hasta el próximo domingo, para presentar la oferta turística del territorio en un momento de crecimiento “más moderado y equilibrado” del turismo, en palabras de la responsable foral de Transportes, Movilidad y Turismo, Sonia Pérez. A falta de conocerse los datos del mes de diciembre del año pasado, hasta noviembre habían llegado a Bizkaia 1,8 millones de turistas, con un incremento del 2,2% respecto al ejercicio previo. “Ha sido un crecimiento moderado, no tan exponencial como en 2023. Ese 2,2% es un poco inferior a la del conjunto de Euskadi”, señalaba la diputada foral en el stand de la Diputación en Ifema. Pérez realiza un balance “positivo” de estos datos, que se estabilizan una vez superado el crecimiento “exponencial y lógico” tras el parón que supuso la pandemia. “Los datos ahora se van asentando”, valoró la diputada, quien restó importancia al dato cuantitativo. “Esos debates de si llegan más o menos turistas se van dejando atrás, y nos vamos centrando más en la calidad, la accesibilidad y las nuevas tendencias de turismo”, como el turismo inclusivo o regenerativo.
Sigue creciendo el turismo internacional, en un 5%, por encima del estatal, que se mantiene más estable aunque continua teniendo mayor peso porcentual al representar el 54% de los viajeros. Entre los mercados emisores, destacan hoy en día países como Estados Unidos, Argentina, Brasil, México, Japón y China, desde donde cada vez llegan más visitantes. “Son turistas que valoramos muy positivamente porque vienen con una estancia larga y un gasto medio-alto, lo cual nos permite ir alargando las pernoctaciones y la estancia en Bizkaia”, apuntaba. “La valoración que hacen es por el trato de la población, nuestras tradiciones, la accesibilidad y que cuidamos el entorno. No solo buscan un consumo rápido sino ser parte de nuestra forma de ser y de vivir. Tenemos que aprender a contratar de otra manera y promocionar a Bizkaia”.
Y pese a que el verano sigue siendo la temporada estrella para el turismo, son en los que, porcentualmente, menos ha crecido el número de viajeros, apenas un 1%, mientras que aumenta de forma significativa el resto de estaciones. “Es el indicador más claro de la clara desestacionalización que se está produciendo, que viene muy acompañado por el turista internacional. Son los que más viajan en cualquier época del año”, explicó.
Pero si hay algo que valora de forma muy positiva la Diputación es la descentralización de los flujos turísticos: hoy en día, ocho de cada diez viajeros visitan al menos una comarca más, además de Bilbao, cuando vienen a Bizkaia. Y cada vez son menos los que se reducen únicamente a la capital su ruta por el territorio, un 13% menos para ser exacto, aunque es indudable que sigue ejerciendo un enorme poder de atracción. “Hace unos años era algo impensable porque los turistas solo visitaban Bilbao; ahora la mayoría también se desplazan hasta a una o dos comarcas”, señaló Pérez. “Ese es el objetivo que nos marcábamos, ir descentralizando cada vez más esos flujos turísticos para que los visitantes no se queden solo en Bilbao sino que recorran Bizkaia.
Entre esas comarcas que también se han ido haciendo un hueco en las rutas turísticas destacan las más cercanas a la costa, como Urdaibai, Lea-Artibai o Uribe-Kosta, aunque también las de interior, desde Enkarterri, Gorbeialdea o Durangaldea, empiezan a recibir cada vez más viajeros. “Estamos fortaleciendo ese turismo de interior, que está asociado normalmente a un turismo rural, precisamente uno de nuestros puntos fuertes”, apuntó Pérez.
“Gran poder de atracción”
También el Ayuntamiento de Bilbao presentó los datos actualizados del turismo en la capital vizcaina que, según valoraron fuentes municipales, “avalan a la villa como destino con un gran poder de atracción de visitantes”. Y es que sigue recibiendo y alojando a más del 68% de visitantes que llegan a Bizkaia, y a un tercio de quienes se alojan en hoteles y apartamentos de Euskadi.
En concreto, entre enero y noviembre del año pasado la visitaron 1,1 millones de viajeros, con un crecimiento del 0,1% respecto al mismo periodo de 2023. Las pernoctaciones alcanzaron los 2,2 millones, un 0,5% más, lo que “posicionan a Bilbao como capital de referencia en turismo urbano”. Destaca el incremento de las personas que eligen apartamentos turísticos para alojarse durante su estancia, que ha crecido un 24% en el último año.
La proporción entre turistas estatales y extranjeros se mantiene prácticamente a la par –los primeros representan el 48% del total y un 52% los segundos–, destacando entre estos últimos los que llegan desde Francia, Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, e Italia. La estancia media de todo el conjunto roza las dos noches.
La ciudad ofrece casi 17.000 plazas en hoteles, apartamentos turísticos, viviendas y habitaciones turísticas, de las que la mayoría (68%) se concentra en establecimientos hoteleros y apartamentos turísticos. Según la presión turística potencial del alojamiento, Bilbao ocupa la posición número 24 entre las capitales de provincia, con 41 plazas por cada mil habitantes. Granada lidera este listado a nivel estatal con 115 plazas por cada mil habitantes y Donostia tiene unas cifras de más de 75 plazas por cada mil habitantes.
Respecto a las viviendas turísticas, en Bilbao representan el 0,77% del total de viviendas censadas en la ciudad; en el caso de Donostia, por ejemplo, esta cifra se eleva al 1,56%. Desde el Ayuntamiento destacaron en este balance que “a pesar de que se conoce la oferta de más de 1.200 viviendas turísticas que ofrecen casi 5.000 plazas en Bilbao, a día de hoy no hay registros de la ocupación real de las mismas”.