La Diputación Foral de Bizkaia analizará el planteamiento de la fiscal superior del País Vasco, Carmen Adán, sobre la conveniencia de que los centros de menores tutelados sean mixtos. En cualquier caso, en la decisión que finalmente se adopte “primará el bienestar del menor”, según subrayó ayer la portavoz foral, Leixuri Arrizabalaga.

Tras señalar que “analizarán” lo planteado por la fiscal superior, Arrizabalaga subrayó que la configuración de la red de acogimiento foral para niños y adolescentes en situación de desprotección “responde siempre a criterios técnicos y profesionales, que sitúan su bienestar por encima de cualquier otra consideración”.

De esta forma, la idoneidad de que estos hogares sean mixtos o no, dijo, “responderá a las necesidades socioafectivas, educativas y relacionales” de estos menores, “que provienen de entornos altamente vulnerables y de riesgo”. Advirtió, por ejemplo, que “muchos de ellos” son hermanos, situaciones en las que lo más recomendable es que permanezcan juntos y no separarlos. “La petición se analizará y se valorará pero siempre atendiendo al bienestar de estos niños y niñas”, finalizó.