Después de nueve días de control absoluto sobre el dinero gastado en Aste Nagusia, la última compra nos ha dejado a 75 céntimos de completar las fiestas con el presupuesto inicial, fijado en 200 euros.
Después de llegar con vida a la última jornada, en cuanto a la economía se refiere, una docena de churros ha sido el culpable de no lo hayamos conseguido. Nos hemos quedado cerca.
Esto es como cuando en el colegio sacabas un 4,9 que, depende del profesor que te corrigiese, se convertía en un cinco o tenías que presentarte a la recuperación. De hecho, no sería la primera vez que con esa nota he tenido que ir a levantarla.
Ayer contábamos con un presupuesto restante de 35,25 euros y, como no volveremos a ver a Marijaia hasta el año que viene, había que despedirse de ella como se merece, a lo grande.
Cuando salí en el ecuador de Aste Nagusia, me gasté 45 euros así que, en caso de repetir la operación de aquella noche al dedillo, todo parecía indicar que no lo íbamos a conseguir.
Para estar a la altura y dejar el listón alto para una posible sección nueva de cara al año que viene, era necesario cenar algo para no rendirse en medio de la misión porque -concluyendo con un refrán- fiesta sin comida, no es fiesta cumplida.
A diferencia del otro día, no se puso bote de ningún tipo por lo que los diez euros que aparté del presupuesto ayer se quedaron en el bolsillo. Lo que no cambió fueron la cantidad de cubatas, tres.
Siguiendo la fórmula que revelé en este periódico. Con el primero le cogí el gusto, el segundo me permitió calibrar la forma en la que dar el sorbo y ya en el tercero, el disfrute es total.
Entre la cena y los cubatas nos dejamos 31 euros. Un gasto que nos permitió irnos a dormir habiendo gastado en total menos de 200 euros.
Después de llegar a casa más tarde que la hora a la que pasa el camión de la basura, era el momento de recargar las pilas y acercarse al recinto festivo en El Arenal para, al igual que con Marijaia, despedirse hasta el año que viene.
Todo parecía estar bajo control pero el olor de los churros según me acercaba andando por el puente para despedir el recinto hasta el año que viene, me obligó a comprarme una docena, por la que pagué cinco euros.
De sobrarme 4,25 a que me salgan a deber 0,75 céntimos. Lo siento, el cuerpo me pedía que cogiese los doce churros. Es más, no me quejo para nada, mereció la pena cada euro que pagué por ellos.
Teniendo en cuenta todas las actividades que hemos llevado a cabo, me parece increíble que hayamos estado presentes en todos ellas ciñéndonos al presupuesto lo máximo posible. Ha habido actividades de todos los tipos: fiesta, teatro, circo, fuegos artificiales...
Y con todo ello hemos podido sobrevivir a las más de 190 horas ininterrumpidas de fiesta por Aste Nagusia. Hemos completado un desembolso de prácticamente un euro por hora.
Haciendo un balance rápido sobre en qué hemos gastado el dinero durante estos nueve días de fiesta, el 25% ha ido destinado a las entradas para acudir al teatro y al circo, mientras que el porcentaje restante ha sido destinado íntegramente al ocio.
Afortunadamente, el presupuesto se termina aquí y podré, en caso de que así lo quiera, acudir a diferentes puntos de la villa sin la necesidad de cuadrar todos los gastos para ajustarme a una cifra de gasto total.
No obstante, es momento de coger aire y descansar porque han sido nueve días en los que hemos sido capaces de combinar planes que han resultado ser más caros y más baratos, quedándonos en el alambre del dinero que marcamos como objetivo cuando empezamos esta aventura el día del txupin.
Por la parte que me toca, puedo decir que estoy muy orgulloso de haber podido demostrar que una persona puede vivir las fiestas estando en la calle todos los días de Aste Nagusia -no a todas horas- sin tener que desembolsar mucho dinero.
De hecho, ha sido una media de 22,30 euros diarios. La quema de Marijaia completó mi segunda Aste Nagusia y encendió la cuenta atrás para volverla a ver asomada en el Teatro Arriaga el próximo año. ¡Gora Marijaia!
Consumición Precio
Cena 13
Cubata (3) 18
Churros 5
TOTAL DÍA 9 36
GASTO TOTAL 200,75