En los próximos años vamos a seguir teniendo veranos de mucho calor, va a ir cambiando el régimen de precipitaciones, con menos lluvias, pero cuando se den van a ser más torrenciales, y la sequía ya está afectando a la vegetación, a la agricultura, a los bosques, y a las propias estaciones del año, que cada vez más se reducen al invierno y al verano. No se puede seguir esperando para poner en marcha medidas contra el cambio climático