Otras nueve jugadoras de equipo paralímpico de baloncesto afgano, compañeras de Nilofar Bayat, que llegó a Bilbao el pasado domingo, esperan en el aeropuerto de Kabul a ser evacuadas a España u otros países de la UE para "reconstruir sus vidas lejos de la presión talibán", según ha informado el Bidaideak Bilbao BSR.

El club bilbaino de baloncesto en silla de ruedas ha comprometido "toda su capacidad de trabajo y organización" para que las jugadoras puedan encontrar tanto en el club de Bilbao "como en otros de la liga española" el "marco" para practicar su deporte.

En un comunicado, el club bilbaino de baloncesto en silla de ruedas ha precisado que las jugadoras son Fátima Hussaini, Rehela Haidari, Wahida Noor, Halima Hussaini, Mina Malik, Rahila Noori, Sakina Safhari, Semin Alí y Safi Kathera, y "han conseguido llegar al aeropuerto internacional de Kabul sorteando controles de las fuerzas irregulares que los talibanes han situado en todas las salidas de la capital".

Ahora, según han añadido, se encuentran a la espera de poder salir del país en alguno de los vuelos humanitarios que tanto el Gobierno español como otros de la Unión Europea han organizado "para paliar el drama de la población civil afgana".

Las compañeras de Nilofar Bayat, que se encuentra desde el pasado domingo en Bilbao junto a su esposo, intentarán "seguir la misma suerte que su capitana y encontrar un espacio de acogida donde reconstruir sus vidas lejos de la presión talibán".

Rueda de prensa de Nilofar Bayat en Bilbao

Rueda de prensa de Nilofar Bayat en Bilbao

El Bidaideak BSR ha hecho un llamamiento para que "la presión de la opinión pública internacional impida que los contingentes talibanes saquen de las zonas internacionales seguras del aeropuerto a estas mujeres con discapacidad", de forma que "se pueda concretar su expatriación".

Según el club, tienen noticia a través del periodista Antonio Pampliega de que "el Gobierno español está haciendo ya gestiones para interesarse por la situación de todas ellas".

"DIFICULTADES OPERATIVAS"

También ha admitido "las grandes dificultades operativas que un rescate de este tipo tiene en el contexto de presión bélica por el que se atraviesa". "Confiamos, en todo caso, en que la presión de la Unión Europea facilite el rescate de quienes sólo quieren vivir en un entorno seguro y próspero, lo que desgraciadamente no se da en su país", ha añadido.

Por otro lado, Bidaideak ha comprometido "toda su capacidad de trabajo y organización" para que, "una vez hayan llegado" a España "y reconstruido mínimamente sus vidas", puedan encontrar tanto en el club de Bilbao, como en otros de la liga española de baloncesto en silla de ruedas, "el marco adecuado para que puedan seguir practicando su deporte".

En este sentido, Bidaideak propondrá a la federación de deporte adaptado, FEEDF, que declare a la propia Liga "competición de acogida" de manera que "se facilite la participación en la misma de personas refugiadas, sorteando las trabas burocráticas que muchas veces se encuentran a la hora de tramitar las fichas deportivas".