bilbao. "Omar es un corredor de futuro. Estoy muy satisfecho con su incorporación a la estructura porque con ella seguimos fomentado y potenciando el ciclismo de base en Euskadi y continuamos dando oportunidades a jóvenes con talento", dijo Miguel Madariaga, presidente de la Fundación Euskadi al atar definitivamente a Omar Fraile, la gran sensación de lo que va de año en aficionados, donde se ha revelado como un imponente escalador, el mejor del pelotón vasco y, dicen, del estatal. El vizcaino, 21 años, tercera temporada como aficionado, acabará lo que resta de temporada defendiendo el maillot del Seguros Bilbao, equipo en el que ha despegado definitivamente, y en 2012 pasará a integrar el Orbea continental, a un palmo de la cima de la pirámide de la Fundación donde se ubica Euskaltel, el equipo en el que Omar, tras un año de aprendizaje, correrá en 2013 y 2014.

Coronado en Gorla En apenas tres meses de competición, Fraile ha convencido a Miguel Madariaga e Igor González de Galdeano por su gran capacidad escaladora. Gracias a ello ganó una etapa de la Essor Basque en el amanecer de la temporada. Y luego gobernó la prueba de Soraluze, que acababa en una cuesta dura y corta. Fue el preludio de lo que vendría. En marzo, después de mostrarse de nuevo intratable en la Aiztondo Klasika, donde una caída le apartó del triunfo que se llevó Eduard Prades, despegó en la Subida a Gorla con una ataque en la última herradura que le encumbró como antes a Contador, Joaquim Rodríguez, Juanma Garate y tantos otros. Fraile debutó hace unas semanas con la selección estatal. Corrió en La Toscana una vuelta de la Copa de las Naciones en la que maravilló al seleccionador José Luis de Santos por su talento y su predisposición al trabajo. Tanto le gusto a De Santos, que piensa en Omar, en periodo de reposo en estos momentos, para integrar la selección en el Tour del Porvenir, durísimo este año. La misma virtud que le ha encumbrado, de todas maneras, le eliminará, muy probablemente, del Mundial de Dinamarca, llano como un mar en calma.

En los 4 Días de Dunkerque, el alemán Marcel Kittel (Skil-Shimano) logró, al sprint, su segunda victoria consecutiva al imponerse en la segunda etapa, disputada entre Douai y Iwuy. En la general, Kittel sigue al frente con un margen de veinte segundos sobre Aidis Kruopis.