En la comarca de Txorierri se fusionan innovación y talento con tradición y cultura. Se trata de un valle con un carácter propio que, además, es la puerta de Bizkaia al mundo gracias al aeropuerto. Aviones que van y vienen sobre el cielo de este territorio y que le otorgan un carácter internacional sobre el que se asientan miles de empresas punteras que permiten sobresalir al Territorio Histórico. Sin embargo, no por ello sus residentes se olvidan de dónde vienen ni de quién ha construido su progreso. Todo se ha cimentado sobre un esfuerzo comunitario. Un valor intrínseco incalculable, como el que atesoran las personas que brillaron ayer con luz propia en Zamudio con motivo de la entrega de los DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak.
En una gala conducida por Alain Salterain, antes de la entrega de los galardones, la directora de DEIA, Marta Martín, ensalzó la labor de los vecinos y vecinas de la zona, que sin la necesidad de realizar grandes proyectos, pero con pequeñas acciones día tras día, impulsan la comarca. Unas cálidas palabras que completó el anfitrión de la noche, el alcalde de Zamudio, Lander Aretxabaleta, al subrayar que estos premios reconocen a “personas y entidades de diversos ámbitos que hacen de Txorierri un lugar mejor”.
Los primeros en subir al escenario fueron los voluntarios de Cáritas en Sondika, que desempeñan acciones como acompañar a personas mayores para la prevención y alivio de la soledad o diversos proyectos educativos, y que animaron al público a colaborar. “Nos hacen falta dos o tres voluntarios más que puedan dedicar un poco de su tiempo a otras personas. Con apenas dos horas a la semana, que puede ser poco para alguien, se marca la diferencia para otra persona, por ejemplo, jugando a cartas o dando un paseo”, explicaron. Por impulsar un ocio formativo y una educación responsable, apostando por la formación de calidad, con mirada científica y haciendo un uso responsable de las tecnologías, se reconoció al Ayuntamiento de Zamudio, que a través de diferentes talleres, tanto durante el curso escolar como en los udalekus, fomenta esta mirada.
Acompañar y proteger a los vecinos de Erandio centran la actividad de Protección Civil en la localidad, sobre todo, cuando los acontecimientos no son positivos. Siempre están dispuestos y su labor de asistencia es indispensable. “Para nosotros es un orgullo. Tratamos de estar donde se nos necesita”, apuntaron.
La plaza de San Miguel de Derio está en plena efervescencia festiva estos días y buena culpa del buen ambiente que se vive estos días es de la comisión de fiestas, que lleva seis décadas impulsando estos festejos. “El primer fin de fiestas ha estado bien y el próximo va a ser potente”, avanzaron con la voz algo tocada. Carácter festivo también tiene la marcha cicloturista de Zamudio que este año ha cumplido 35 ediciones. Uno de sus impulsores es Seve Tielve, que tiene cuerda para rato. “Tengo ganas de seguir impulsando nuevas ediciones”, señaló ilusionado.
Por ser un referente deportivo en Lezama desde 1924, lo que le convierten en uno de los más antiguos de la comarca –con permiso del Erandio–, el Lezama Sport fue reconocido. Tras la pandemia, un grupo de personas se unió para mantener viva la entidad y día a día pelean por continuar disfrutando del fútbol. “Queremos dedicar este premio a las personas que han ayudado al club”, manifestaron.
Cercanía en el trato y negocio familiar. Estas características distinguen a Víctor Harategia, que comenzó en 1978 de la mano de Víctor Madariaga y que ahora está en manos de su hijo Mikel. “En todos estos años no me he cogido vacaciones, pero ahora mi hijo se lo monta mejor”, bromeó Víctor, que aprendió el oficio de Jon Madariaga, “un artista de la época”.
Precisamente, otro comercio histórico con casi 60 años de historia en Zamudio es Ultramarinos Soba, que cerró el pasado diciembre por jubilación dejando una profunda huella en sus vecinos. “Hemos tenido unos clientes fabulosos que nos han apoyado siempre”, agradeció Aurelio Soba. El último capítulo de la gala fue para Jado Ikastetxea de Erandio, representada por una veintena de alumnos y alumnas que han destacado diseñando unos juguetes sensoriales para los más pequeños.