Maroan Sannadi sufrió en la visita al Espanyol otro caso de racismo tras los insultos recibidos en el Benito Villamarín semanas atrás y después de que un jugador del Amorebieta le insultara también defiendo los colores del Barakaldo el pasado mes de diciembre en la visita de los fabriles a Urritxe. Ocurrió esta vez en el RCDE Stadium, donde en enero de 2020 padeció también insultos racistas Iñaki Williams, que vio este domingo cómo su compañero Maroan recibía el insulto “puto moro”. Corría el minuto 17 cuando el nueve rojiblanco, en su primera titularidad como rojiblanco, alertó de lo ocurrido a un asistente del colegiado Cuadra Fernández, que tras recibir la notificación a través del pinganillo activó el protocolo contra los insultos racistas y detuvo el partido durante unos minutos.

Se lanzó un aviso por megafonía y se proyectó un mensaje en los videomarcadores antes de que el juego se reanudara. Al igual que LaLiga y el Espanyol, el Athletic condenó lo ocurrido a través de las redes sociales. Recién finalizado el choque, Iñaki Williams, a quien el público local silbó a raíz de lo sucedido, señaló que “no pueden ocurrir este tipo de cosas y no es la primera vez que pasa aquí. A mí me pasó años atrás y no debe empañar a la afición del Espanyol, que tiene leyendas como N’Kono de color negro y un lateral derecho marroquí”.

“Los jugadores del Espanyol necesitan a su afición y no que cuatro empañen lo que es el fútbol. Ha sido una lástima, pero el árbitro ha actuado muy bien, ha salido en las pantallas y luego no he entendido por qué me pitaban, pero esperemos que se corrija, darle visibilidad y que sancionen a los autores”, agregó el mayor de los Williams, quien apuntó después en zona mixta que “en el campo estábamos tranquilos, porque somos conscientes de que no todo el mundo tiene luces y que algunos vienen a hacer su show. Nosotros estamos orgullosos de dónde somos y del color de piel que tenemos”.

Ernesto Valverde indicó que “no sabía si lo ocurrido había sido con Iñaki o Maroan, pero da igual. Lo condenamos, porque no nos gusta que ocurra con nuestros jugadores, ni con los rivales en ningún estadio y es un problema de educación social”. También condenó el incidente racista Óscar de Marcos, quien manifestó respecto al racismo que “hay que erradicarlo, cada vez son menos, pero siguen haciendo ruido. Iñaki ha hecho lo correcto al avisar al árbitro, se ha activado el protocolo para que no se repita y parece mentira, pero se sigue dando y sigue sorprendiendo. Esperamos que con el paso del tiempo se corrija”.

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Lo que recoge el acta

Cuadra Fernández reflejó el incidente racista en el acta del partido, donde expuso que “en el minuto 17 del partido el jugador con dorsal N° 9 del Athletic Club, D. Iñaki Williams, me comunicó un incidente racista desde uno de los fondos del estadio donde se encontraban los aficionados del RCD Espanyol (identificados como tal por su indumentaria) que se habían dirigido al jugador con dorsal N° 21 de su equipo, D. Maroan Sannadi, en los siguientes términos: “¡Puto moro!”, por lo que en ese momento activé el protocolo contra el racismo establecido para estos casos”.