El Athletic prepara la crucial visita al Atlético mientras digiere el anuncio de la marcha de Iker Muniain al término de la temporada. Después de que Raúl García desvelara el lunes de la pasada semana que colgará las botas una vez finalice el curso, en la matinal del miércoles fue el capitán quien informó de su decisión a una plantilla que lloró su sentencia.
Compañeros como Iñaki Williams y Óscar de Marcos, quien comenzó su aventura como león junto con el de la Txantrea en 2009, apenas pudieron contener las lágrimas en el gimnasio de Lezama, donde Muniain puso el punto final a las elucubraciones acerca de su futuro delante de un plantel que abrirá una nueva etapa sin la huella en la caseta de una leyenda del club.
Salida de Iker Muniain
Iñigo Ruiz de Galarreta (Eibar, 6-VIII-1993), quien regresó al Athletic una década después en junio del año pasado, reconoció en rueda de prensa que “sabíamos que la situación de Iker estaba un poco en el aire y uno se va preparando por si este momento podía llegar, pero es duro cuando un jugador tan importante y un referente tan grande para todos nosotros dice que el año que viene no va a estar. Es un momento difícil, pero nos quedamos con todo lo bueno que ha dado Iker en estos quince años al club”. “
Es un orgullo que un jugador como él represente los valores de este club”, agregó el centrocampista eibartarra, quien remarcó que Muniain “es una leyenda, el segundo jugador con más partidos en la historia del club, ha podido jugar un montón de finales, ha ganado títulos y poder ganar la Copa este año era algo que tanto él como De Marcos se merecían después de pelearlo tanto tiempo. Es un final feliz y dentro del vestuario como compañeros estamos todos muy agradecidos a Iker”.
“Entiendo que fuera también, pero para nosotros es un capitán como la copa de un pino. Siempre está pendiente de todo el mundo para ayudar a todos los jóvenes que suben al primer equipo, a los que llegamos y a los que ya están. Es uno de esos jugadores que ante cualquier cosa sabes que lo tienes ahí, puedes preguntarle y nos guía a todos”, detalló Ruiz de Galarreta, quien incidió ante los medios de comunicación en que tanto él como el resto de integrantes de la plantilla “le estamos agradecidos de por vida y con ganas de disfrutar estas semanas que nos quedan juntos y pelear por las cosas bonitas que tenemos que pelear todavía”.
"Ley de vida"
A falta de conocer el futuro de otro pilar en el vestuario como De Marcos, cuyo contrato vence el próximo 30 de junio, es seguro que otros futbolistas con poso y experiencia deberán dar un paso al frente de puertas hacia dentro para ganar en liderazgo.
Ruiz de Galarreta, pese a contar con un amplio recorrido futbolístico a sus espaldas, entiende que “es ley de vida, todos estamos de paso y es verdad que cuando jugadores tan importantes y referentes se van yendo es difícil, pero otros compañeros tendrán que dar un paso adelante y asumir esas responsabilidades con todo lo que ellos nos han ido enseñando e inculcando. Seguro que hay muchos compañeros preparados para dar ese paso al frente. En mi caso acabo de llegar y estoy aprendiendo de todos ellos. Intentaré sumar en todo lo que pueda, pero ese rol les tocará a compañeros que llevan aquí muchos años, a los que todos respetamos mucho también, nos gusta escucharlos y nos guían”.
Cuestionado por la manera en la que Muniain ha gestionado esta temporada su delicada situación por la falta de minutos, el centrocampista rojiblanco aseguró que “este año le ha tocado asumir un rol un poco diferente al que estaba acostumbrado y deja un legado muy grande también en ese sentido por la forma en la que una leyenda como él ha asumido ese rol sumando siempre como el que más. Ha ayudado y ha empujado en la dirección en la que tenía que ir el equipo, ha sido un ejemplo en todos los sentidos y estamos todos agradecidísimos”. En lo personal, mientras tanto, Ruiz de Galarreta reconoció que “poder volver y disfrutar esta última temporada de Iker aquí ha sido un verdadero regalo. Le conozco desde que éramos niños y estábamos aquí en la residencia. Desde ese momento siempre se ha portado muy bien conmigo al igual que su familia. Yo volvía este año después de mucho tiempo, siempre habíamos mantenido el contacto y es alguien que desde el primer día ayuda a que todo el mundo esté contento e integrado en el vestuario”.
El equipo está “fuerte”
Si bien Muniain, al igual que Raúl García, dejará un importante vacío por cubrir dentro de la caseta, el grupo se mantiene fuerte y ambicioso tal como recalcó el propio Ruiz de Galarreta, quien advirtió que “Iker nos ha insistido en su despedida y en todo momento que ha intentado siempre enseñar a todos los valores que tiene este club y los que debe tener un capitán y todos los jugadores de este equipo. Estoy seguro de que otros asumirán su rol. El equipo está fuerte y con ganas de acabar bien la temporada. Tenemos ese reto ilusionante de pelear la cuarta plaza y sabemos que será muy difícil, pero el grupo está con muchas ganas y con mucha ilusión de pelear por ello”.
