N la previa del estreno de Marcelino García Toral como entrenador del Athletic, comparecencia que sirvió también de presentación del técnico ante la prensa, este recordó sus malos números en los enfrentamientos con el Barcelona, al que únicamente había vencido en una ocasión "en 19 o 20 partidos". Eran 21, que fueron 22 tras el choque del día de Reyes, pero el contador de victorias se mantuvo en uno, aunque no puede pasarse por alto la relevancia de dicho encuentro, ya que el asturiano se impuso al Barça cuando dirigía al Valencia en la final de Copa. Ahora, tras el aplazamiento del choque frente al Atlético de Madrid, el segundo rival con el que Marcelino se verá las caras desde el banquillo rojiblanco será el Real Madrid, otro equipo que no se le da excesivamente bien, con un balance de tres victorias, tres empates y diez derrotas en 16 partidos, todos ellos de liga.

Nunca se ha enfrentando el técnico de Villaviciosa al conjunto merengue en un torneo distinto al campeonato de la regularidad, por lo que la cita del jueves en el estadio de La Rosaleda de Málaga correspondiente a las semifinales de la Supercopa, será una novedad.

En el último enfrentamiento entre Marcelino y el Real Madrid, que se produjo el 3 de abril de 2019, mientras el entrenador dirigía al Valencia, club que le echó en septiembre de ese mismo año, fue el conjunto chétras un apretado 2-1. Guedes, pasada la primera media hora de juego, y Garay, a seis minutos del final, pusieron por delante al Valencia, que vio cómo Benzema, ya en el descuento, acortaba distancias en el marcador. El tanto del francés llegó demasiado tarde y resultó insuficiente para que los blancos sacaran al menos un empate en su visita a Mestalla.

Hay que echar la vista atrás algo más de cinco años, concretamente hasta el 13 de diciembre de 2015, para dar con la que fue la segunda victoria de Marcelino frente al equipo blanco. Por aquel entonces el técnico asturiano dirigía por tercera campaña seguida al Villarreal, al que rescató del infierno de la Segunda División y lo devolvió a la Champions League. El submarino amarillo se mantuvo firme en la cuarta posición desde la décimo séptima jornada y solo dos antes se impuso por la mínima (1-0) a un Madrid que entonces marchaba tercero en la clasificación. Roberto Soldado, que había llegado a Vila-real como un fichaje estrella tras su infructuosa experiencia en el Tottenham marcó el único gol del partido. Un tanto tempranero, que llegó en el minuto ocho, fue suficiente para que el Villarreal se hiciera con los tres puntos.

Al margen de las dos victorias citadas con anterioridad, que llegaron con los equipos de Marcelino actuando como locales, hay una tercera, sin duda la de mayor mérito, y que es también la más lejana en el tiempo. En su primera experiencia en la máxima categoría, en la campaña 2006-07, después de haber conseguido el ascenso en el verano de 2006 con el Recreativo de Huelva, el entrenador asturiano logró toda una gesta al conquistar el Santiago Bernabéu con un contundente 0-3 ante el Madrid de los galácticos, aunque ya sin el retirado Zidane en sus filas. Un equipo que se proclamaría campeón de liga en la última jornada y en cuyo once figuraron, entre otros, Ronaldo, Raúl, Van Nistelrooy, Beckham, Roberto Carlos, Cannavaro, Sergio Ramos o Casillas.

Sinama-Pongolle, Uche y Viqueira fueron los goleadores de una noche triste, la de aquel 20 de diciembre de 2006, para el conjunto andaluz, que vio cómo cinco de sus aficionados fallecían en el viaje de Huelva a Madrid para ver el partido. Marcelino y los pupilos les rindieron el mejor homenaje posible con un triunfo histórico.