DONOSTIA. El entrenador del Athletic, Gaizka Garitano, dijo estar "jodido" por la derrota en el derbi ante la Real, en un partido que no descartaba se decantara a su favor tras el gol de Iñaki Williams, aunque admitió también el gran nivel ofensivo de la Real Sociedad.

"La Real en partidos de ida y vuelta se siente cómoda, quisimos ganar el partido y no tienes tantas ayudas ni estás tan junto y al ir a ganar el partido nos costó perderlo", lamentó el preparador tras el encuentro.

Reconoció que en el primer tiempo a su equipo le costó "mucho" dominar el balón pero le gusto cómo jugó el Athletic en el segundo tiempo, a pesar de que llegaron en ese período los dos goles realistas.

"La gente estaba cansada y había lesionados como Yuri o Iñigo. Ha sido una pena porque cuando mejor estábamos nos llegó su segundo gol", recordó el entrenador del Athletic, que aprovechó la comparecencia para quitar hierro a la expulsión de Iker Muniain. EFE

"Iker no pega una patada ni nada. Ha llegado tarde y no ha ido a hacer daño, aunque su expulsión haya sido justa pero luego se ha disculpado porque ya sabéis cómo es", relató sobre el momento de mayor tensión en el derbi.

Garitano reconoció que la Copa está pasando factura a su plantilla aunque da por bueno los puntos que puede dejarse en LaLiga si se llega a la final, en la que le gustaría encontrarse con la Real y que hubiera "una final entre equipos vascos".