BILBAO. Los arrestos se produjeron en dos operaciones que tuvieron lugar los días 16 de octubre y 21, 22 y 23 del mismo mes, a siete personas de diversas nacionalidades (Senegal, Marruecos, Argelia y Bangladesh).

La operación comenzó después de que el Ayuntamiento de Bilbao detectara irregularidades y diera el aviso.

El modo de operar que seguían los investigados consistía en empadronarse mediante un contrato de hospedaje-pupilaje, falsificando la firma de los propietarios de las viviendas usadas sin que estos últimos tuvieran conocimiento de lo que sucedía.

El ideólogo se encargaba de conseguir los datos de filiación de los titulares de los pisos para, posteriormente y sin su consentimiento, realizar contratos de hospedaje-pupilaje.

Además, cobraba al resto de implicados 150 euros por el trámite de empadronamiento y 50 euros más al mes durante el periodo que estuviesen empadronados.

Por ello, a esta persona se le imputan, además de un presunto delito de falsedad documental, delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Los investigadores llegaron a la conclusión de que los detenidos buscaban acceder al cobro de prestaciones públicas de Lanbide y, paralelamente, obtener permisos de residencia por arraigo social.