Es muy duro digerir cualquier muerte, hacerlo con dos es tremendamente duro y más si cabe cuando los fallecidos son personas jóvenes y mueren en trágicas circunstancias. Ayer Sestao amaneció triste, impactado y dolido por el fallecimiento de Erika y Ethan, madre e hijo de 42 y 19 años, en un atropello ocurrido el martes hacia las ocho de la tarde en la localidad cántabra de Ribamontán al Mar, hechos en los que también falleció una mujer de 68 años y natural de Santo Domingo de la Calzada.

La noticia fue corriendo desde última hora de la noche en la localidad sestaoarra y ayer fue conociéndose cada vez entre más y más sestaoarras. Las víctimas eran personas muy conocidas en el municipio, sobre todo, por su implicación en el mundo del deporte, puesto que Ethan era entrenador en las categorías inferiores de la Sociedad Deportiva San Pedro y también entrenaba y jugaba en el Begoñako Arteagabe, equipo de la Tercera Regional vizcaina. “Lo que ha sucedido es terrible, un drama que ha destrozado por completo a una familia y que afecta a muchas personas porque las víctimas estaban muy ligadas al mundo del deporte de la localidad”, aseguró Ainhoa Basabe, alcaldesa de Sestao.

Desde la institución local aseguraron haberse puesto en contacto con el marido y padre de las víctimas para trasladarle el pésame de todo el municipio. “Vamos a estar con esta familia, les vamos a acompañar y apoyar en todo lo que necesiten como no puede ser de otra manera”, señaló la primera edil.

Por desgracia, lo ocurrido el pasado martes en Ribamontán al Mar recuerda a algún episodio pasado similar con protagonistas también de Sestao. “Hace unos días un vecino falleció en un accidente de moto en Asturias y hace algún tiempo, otros dos fueron atropellados en circunstancias similares a lo que ha ocurrido ahora. En aquella ocasión murió una mujer y esta vez tenemos que lamentar la muerte de dos vecinos de nuestro municipio. Por desgracia, parece que la historia se repite”, concluyó la alcaldesa de Sestao.

Ethan tenía un papel importante en dos clubes de fútbol del municipio, el Begoñako Arteagabe, club en el que entrenaba y jugaba en el equipo senior, y también en la Sociedad Deportiva San Pedro, donde el fallecido era el entrenador de uno de sus equipos de categoría infantil.

Un hombre observa las esquelas de Erika y Ethan. Pablo Viñas

“Estamos devastados. Me llegó la noticia justo antes de que empezase el partido de Copa del Athletic y ahí se acabó todo. Estamos muy tristes porque Ethan era una delicia de chaval y su madre, Erika, lo mismo. Son un cielo de familia. Esto que ha ocurrido es como si te diesen un zarpazo en el corazón. A Ethan le conocía desde antes de que pasase a formar parte de nuestro club. Es terrible”, explicó visiblemente emocionado Hipólito Vázquez, presidente de la Sociedad Deportiva San Pedro.

El club azulgrana vivirá un momento especialmente duro dentro de un par de semanas cuando se retomen las competiciones, ya que ese será el instante en el que se tratará de explicar lo sucedido a los niños a los que Ethan trasladaba su pasión por el fútbol a través de sus entrenamientos.

Cómo decírselo a los chavales

“Ese va a ser, sin lugar a dudas, el momento más duro desde que soy presidente de este club. Explicar que su entrenador ya no va a estar con ellos va a ser muy difícil. Sé que a lo largo de estas dos semanas sus familias les irán explicando lo sucedido y les arroparán, pero va a ser algo durísimo”, desarrolló el presidente de la sociedad.

Cuando se retomen las competiciones tras el parón por la Semana Santa, el club solicitará que se guarde un minuto de silencio en los partidos de todos sus equipos en memoria y homenaje de Erika y Ethan.

El otro club del joven arrollado, el Begoñako Arteagabe también mostró su pesar por el trágico suceso. Así las cosas, en sus redes sociales se pudo leer este mensaje: “Día duro. Se nos han ido dos personas ejemplares. Siempre estaréis con nosotros, nunca os olvidaremos. Siempre en nuestros corazones”.

La huella dejada por madre e hijo y, por extensión, por toda su familia en la localidad va mucho más allá de los clubes en cuyo día a día se implicaron. Desde el Sestao River también mostraron su pesar por el fallecimiento de ambos con un mensaje en redes sociales. “La tristeza y el dolor nos embargan y no existe consuelo. Ethan y Erika, os habéis ido de esta vida, pero jamás de nuestros corazones. Nuestro más sentido pésame para la familia, amigos y para sus clubes Sociedad Deportiva San Pedro y Begoñako Arteagabe. Descansen en paz. Goian bego”.

Otras entidades deportivas de Ezkerraldea como, por ejemplo, el Club Portugalete y el Dinamo San Juan mostraron también su profundo pesar por lo ocurrido.

Pero además de los lazos que habían estrechado en Sestao, los dos fallecidos han dejado una profunda huella en Ribamontán al Mar. Esta familia sestaoarra es muy conocida en el camping Somo Parque, establecimiento ubicado a escasos metros del fatal suceso.

Ayer, como no podía ser de otra manera, el desconsuelo era el sentir general entre los campistas. Un profundo dolor, pena y rabia por lo ocurrido. “Estamos jodidos, muy dolidos por lo ocurrido. Conocemos de hace muchísimo tiempo a las tres víctimas y a sus familias. Más que clientes, que vienen aquí a disfrutar de sus periodos vacacionales y fines de semana, son casi familiares”, destacó Eneko Valle, uno de responsables de este camping en los que no son pocos los vizcainos y, especialmente, habitantes de Ezkerraldea que pasan allí sus vacaciones.

En el camping, como de la familia

“Tenemos una relación estrechísima con la familia de Sestao. De hecho, conozco a Erika desde hace más de 20 años, a Ethan le hemos visto crecer... Mis hijos solían salir a pasear con Erika. Es terrible lo que ha pasado y todo, por lo que parece, por la temeridad de una persona”, señaló Eneko.

El camping, pese a ser pequeño, vive en estas jornadas su campaña alta, las víctimas llegaron al establecimiento el lunes y a lo largo de estos días el camping ha ido llenándose . “Ha sido una auténtica tragedia lo que ha ocurrido, pero si llega a pasar el miércoles o el jueves, días en los que ya hay muchas más personas que pasean por esa zona, el conductor se podía haber llevado a muchas más personas por delante”, explicó Eneko.

Él no estaba en el camping en el momento en el que el coche, un vehículo Ssanyong Power 4W, se salió de la calzada, invadiendo la zona para peatones del punto kilométrico 0,6 de la carretera CA-433, pero sí le han contado los hechos personas que presenciaron lo ocurrido. “Se oyó un golpe muy fuerte, el coche perdió una rueda y atropelló a las tres personas. Luego chocó contra otro coche y acabó yéndose contra nuestras instalaciones”, concluyó uno de los responsables del camping en el que Erika, Ethan y su familia han pasado tantos buenos momentos y en el que, en sus inmediaciones esta madre e hijo encontraron la muerte a causa de la imprudencia de un conductor.