El consejero de Hacienda y Finanzas, Noël d’Anjou, ha anunciado este martes que los presupuestos del Gobierno vasco para 2026 experimentarán un crecimiento "moderado" respecto a los de 2025. En sus palabras, el objetivo principal es “garantizar el bienestar de la ciudadanía vasca y el crecimiento económico en un contexto de incertidumbres globales”, en alusión a la política arancelaria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

D’Anjou ha explicado que las cuentas combinarán “acciones a corto plazo que respondan a necesidades urgentes” con “una visión a largo plazo que posicione a Euskadi entre las regiones más avanzadas de Europa”. Además, estarán centradas en “construir una Euskadi más sostenible, digital y volcada en las personas” y el consejero ha subrayado que se integrará la perspectiva de género en todas las políticas.

Las directrices del presupuesto se han elaborado a partir de un cuadro macroeconómico revisado al alza que contempla un crecimiento del PIB del 2,1 % en 2025 y del 1,8 % en 2026, aumentando así en una décima cada año las cifras que el Ejecutivo manejaba en las últimas previsiones.

En cuanto al empleo, el Gobierno vasco calcula que en 2026 se generarán en torno a 12.000 puestos de trabajo, lo que representaría un incremento del 1,2 %. En la misma línea, la tasa de desempleo se reduciría hasta el 7 % este mismo año, con vistas a mantener o mejorar la cifra el año siguiente, cuando podría reducirse hasta el 6,7 %.

Ejes presupuestarios

Para abordar las cuentas, el Ejecutivo ha fijado cinco grandes ejes que vertebrarán el proyecto, los que ya guían la actual legislatura: mejorar la vida de las personas; impulsar el crecimiento económico y el bienestar; avanzar en la transformación energética y la sostenibilidad; fomentar un modelo de convivencia sólido y justo; y fortalecer el autogobierno.

De esta manera, D’Anjou ha destacado que las medidas prioritarias serán aquellas destinadas a mejorar la salud, fomentar el empleo de calidad, garantizar una educación inclusiva, facilitar el acceso a la vivienda, mejorar la seguridad, y fortalecer los servicios sociales.

El objetivo, ha relatado, es impulsar "una economía más fuerte, competitiva e inclusiva, sin dejar a nadie atrás". En referencia a las políticas arancelarias de la administración Trump en Estados Unidos, el consejero ha advertido de que "no podemos ignorar el contexto en el que nos movemos", dado que esta es "una época marcada por la incertidumbre y con un crecimiento de movimientos políticos que no compartimos". A pesar de ello, ha destacado, el Gobierno vasco aspira a "combinar crecimiento económico con bienestar social".

Por ello, D’Anjou ha anunciado que los presupuestos mantendrán la apuesta por la inversión en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), con un incremento anual mínimo del 6 % para reforzar “nuestras capacidades estratégicas” en un mundo “cada vez más tecnológico y digital”.

En este sentido, el consejero ha recordado la dana de Valencia y el incidente del apagón para poner de manifiesto que la transformación energética y la sostenibilidad son ya “una necesidad urgente, no una opción de futuro”. Por ello, desde el Ejecutivo se redoblarán los esfuerzos para acelerar la transición energética, modernizar el sector productivo y ganar competitividad de forma sostenible. Para avanzar en este ámbito, D’Anjou ha asegurado que el Gobierno vasco está dispuesto a asumir nuevas competencias y a gestionar directamente las inversiones.

El consejero ha afirmado también que “la igualdad entre mujeres y hombres, la memoria histórica y la defensa de los derechos fundamentales no son solo valores de referencia, sino pilares del modelo democrático vasco”. Por ello, las directrices económicas están también centradas en diseñar un presupuesto que responda a los principios de convivencia, respeto y derechos humanos.

D’Anjou ha destacado, además, que "en el marco de nuestras competencias y la legalidad vigente, debemos avanzar en el fortalecimiento de nuestro autogobierno", así como "aprovechar las oportunidades que ofrece la internacionalización de Euskadi" para posicionar al territorio como referente europeo en innovación, sostenibilidad y bienestar.

Estas serán las bases de los presupuestos de 2026, ha anunciado el titular de Hacienda y Finanzas, cuyas prioridades incluirán "el mantenimiento de la sostenibilidad de las finanzas públicas". “El escenario actual exige prudencia, pero también valentía para tomar decisiones estratégicas”, ha expresado D'Anjou.

Calendario

Estas primeras directrices marcadas en la reunión del Consejo de Gobierno de este martes dan comienzo al proceso presupuestario de Euskadi. El plan es que en septiembre se disponga de un primer borrador, que será completado con las conclusiones del Consejo Vasco de Finanzas. Así, el 28 de octubre, el Ejecutivo aprobará el anteproyecto y lo remitirá al Parlamento Vasco antes del 31 del mismo mes.