El Consejo de Gobierno de la Diputación de Bizkaia ha extendido hasta octubre los aplazamientos extraordinarios en el pago de impuestos, y ha aprobado un decreto foral que eleva hasta el 5,5 por ciento la deflactación del IRPF, ajustando este impuesto a la evolución interanual de la inflación subyacente.

Hasta el momento, unos 14.000 autónomos y empresas ya se han beneficiado del aplazamiento extraordinario en el pago de impuestos en los dos primeros trimestres del año, sin intereses ni garantías, por importes que suman 116,3 millones de euros, según ha informado este miércoles la institución foral.

Además, la Diputación ha establecido una deducción extraordinaria de hasta 200 euros para 335.000 contribuyentes con rentas inferiores a 35.000 euros anuales, y ha exonerado a autónomos y empresas con un volumen de operaciones menor a 50 millones de euros de los pagos fraccionados de IRPF y Sociedades.

Los autónomos, microempresas y pequeñas y medianas empresas podrán aplazar hasta octubre el pago de sus impuestos sin aportar garantías y sin abonar intereses, devolviendo su deuda en nueve meses con tres de carencia.

ECONOMÍA DOMÉSTICA

El efecto estimado de estas medidas es de 125,3 millones de euros de menor recaudación y por lo tanto de mayor liquidez en las economías domésticas, así como de otros 32 millones de inyección de liquidez en las actividades económicas.

La Diputación ha elevado hasta el 5,5 % la deflactación del IRPF para el ejercicio 2022, con el fin de compensar la pérdida de capacidad adquisitiva de los trabajadores.

Para ello, ha establecido una deflactación adicional de un 4 % sobre la ya aplicada, del 1,5%, en la Norma Foral de Presupuestos de 2022.

Esta deflactación adicional se aplicará en la tarifa de la base general, y se incrementará en el mismo porcentaje la reducción por tributación conjunta, la minoración de cuota y las deducciones personales y familiares.

También se aplicará en la tabla de retenciones de 2022, por lo que esta medida tendrá efecto en las nóminas percibidas desde el 1 de septiembre.

La deducción de 200 euros en el IRPF de 2022 se aplicará íntegramente en todas las declaraciones con rentas inferiores a 30.000 euros, se reducirá progresivamente a partir de esta cantidad y desaparecerá para las declaraciones con base superior a los 35.000 euros.

Tomando como referencia los datos del ejercicio 2020 en Bizkaia, unas 270.000 declaraciones tributan por una renta inferior a los 30.000 euros, y otras 65.000 tienen una base entre 30.000 y 35.000 euros.

Por otra parte, las ayudas públicas que reciban los contribuyentes para paliar la situación derivada del incremento de la inflación se han declarado exentas del IRPF.

FAMILIAS VULNERABLES

Se trata de la ayuda de 200 euros para familias vulnerables y de las concedidas en virtud del programa de emisión de bonos digitales para colectivos vulnerables.

Con el objetivo de proporcionar liquidez a las personas que desarrollan actividades económicas, estas quedan exoneradas de abonar los pagos fraccionados de IRPF durante todo el ejercicio 2022.

Para ello se prorroga al tercer y al cuarto trimestre del año la exoneración ya establecida para la primera mitad del ejercicio, en la que ha supuesto una inyección de liquidez de 11 millones de euros.

También se ha exonerado del pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades en 2022 a las empresas cuyo volumen de operaciones sea inferior a 50 millones de euros, siempre que no tributen en el régimen especial de los grupos fiscales.