bilbao - “Ha sido un año bueno porque se ha ganado la Liga aunque las expectativas hace unas semanas eran para hacer un año mucho mejor. Nos vamos con ese sabor agridulce de que la temporada podía haber sido mucho mejor. No tenemos excusas, estamos obligados a ganarlo todo”, reconoció Piqué tras la derrota del Barça ante el Valencia en la final de Copa. El central blaugrana, sin pelos en la lengua, admitió estar “decepcionado” con el cierre de campaña y con cómo se desarrolló el partido de ayer: “Han llegado tres veces y han marcado dos goles. Después tuvimos ocasiones en la primera parte, pero estoy contento por la reacción. Tuvimos opciones como un palo de Leo y después el gol. No pudimos empatar”.

Al igual que Piqué, Ernesto Valverde también reconoció irse de vacaciones “con malas sensaciones”: “Pero si le dan a elegir a cualquiera si llegar al 1 de mayo pudiendo ganar los tres títulos, todos dirán que sí”. El técnico del Barcelona alabó el desgaste físico de los suyos en una segunda mitad de infarto: “Los jugadores se han vaciado en el campo. Nunca hemos dado el partido por perdido. Sabíamos que un gol nos metía en el partido, pero no hemos podido hacer el segundo. El Valencia tiene un gran contraataque y ha estado efectivo. Nosotros jugábamos en su campo, llegábamos fácil, pero nos ha faltado chispa para finalizar”.

Y en la otra cara de la moneda, Marcelino no podía dejar de sonreír. El entrenador ché se definió ayer como “el hombre más feliz del mundo” después de conseguir con el Valencia su primer título como técnico. “Siempre hay una primera final y nos ha costado siete semifinales llegar a una final, así que este momento es más especial todavía”, reconoció aún sobre el césped. A su lado, su capitán, Dani Parejo, no podía ocultar las lágrimas. El encargado de levantar el trofeo de Copa recordó los “malos momentos” que pasó vistiendo la camiseta del Valencia, pero que a pesar de ello, el club ché “merece más alegrías como esta”: “El año era increíble pasara lo que pasara. Esto es increíble”. - Efe