Bilbao - El Bilbao Basket superó ayer el trámite administrativo que le faltaba para poder hacer efectivo el ascenso deportivo a la ACB conquistado el primer fin de semana de junio en la Final Four de la LEB Oro disputada en la capital vizcaina. La patronal de clubes dio luz verde a su retorno a la máxima categoría del baloncesto estatal toda vez que su Asamblea General votó de manera unánime tanto su admisión como nuevo socio como la del Betis. Ambos clubes presentaron tanto la documentación como las cantidades económicas necesarias para su inscripción dentro de los plazos marcados por la competición y superaron con éxito las comprobaciones llevadas a cabo tanto por los auditores como por parte de la ACB.
El conjunto vizcaino ha sido capaz de revertir una situación que hace poco más de un año parecía desesperada tanto en lo deportivo como en los institucional. El descenso de categoría fue el punto final de un curso 2017-18 absolutamente aciago al que siguió, además, el despido de gran parte de sus trabajadores tanto en la parcela deportiva como en la administrativa y la entrada en proceso concursal para tratar de reducir y ordenar una deuda que amenazaba con dar carpetazo al club. Pero una vez tocado fondo, comenzó el resurgir de la entidad de Miribilla. Su desempeño deportivo el pasado ejercicio en la LEB Oro fue magnífico, con la guinda del ascenso en la Final Four de Bilbao, y, además, pocos días después consiguió la adhesión legalmente requerida a su propuesta de convenio para poder salir del procedimiento concursal. Finalmente, el 28 de junio logró firmar los convenios particulares con sus acreedores privilegiados (Hacienda, Seguridad Social, Caja Rural de Navarra y Fogasa) y cursar su solicitud de ingreso en la ACB, que tras las comprobaciones pertinentes fue aprobada ayer. Su situación económica sigue siendo peliaguda -de hecho, su presupuesto para confección de plantilla será probablemente el menor de toda la Liga Endesa-, pero va encauzándose poco a poco.
Además, en la asamblea de ayer quedó aprobado también el calendario competitivo del ejercicio 2019-20. Tras la disputa de la Supercopa en Madrid los días 21 y 22 de septiembre entre Real Madrid, Barcelona, Valencia Basket y Fuenlabrada, la Liga Endesa arrancará con doble jornada en la siguiente semana. La inaugural dará comienzo el martes, día 24, y se extenderá hasta el viernes 27, seguida de forma inmediata con la segunda, el sábado 28 y el domingo 29. La temporada regular bajará el telón con la 34ª jornada, a disputarse entre el 9 y el 10 de mayo, y por el camino habrá dos jornadas que se disputarán entre semana: la 29ª (15, 16 y 17 de abril) y la 33ª (6, 7 y 8 de mayo). La Copa, que tendrá Málaga como sede, mantiene sus fechas en febrero: se jugará del 13 al 16.
El punto polémico del calendario llega con las fechas del play-off. El hecho de que la Final Four de la Euroliga se vaya a disputar más tarde de lo habitual y coincida con las eliminatorias por el título de la Liga Endesa y la necesidad de terminar la temporada el 12 de junio debido a la disputa del Preolímpico de la FIBA ha llevado a la ACB a elaborar dos calendarios dependiendo de si alguno de sus equipos llega al tramo final de la lucha por el cetro continental. En caso afirmativo, y si además una de las semifinales del campeonato doméstico llega al quinto partido, los dos finalistas tendrían que jugar partidos en días consecutivos. Los dos primeros tendrían lugar los días 6 y 7 de junio, mientras que el tercero y el cuarto, el último si fuese necesario, el 9 y el 10 de ese mes.
Segundo equipo sénior Por otra parte, la Federación Vasca de Baloncesto anunció ayer los clubes que compondrán el próximo curso la Primera Nacional, antesala de la EBA, con presencia del Fundación Bilbao Basket. Así, la entidad de Miribilla cumple con su deseo de contar con un segundo conjunto sénior.
