El fuerte y el faro de La Galea, uno de esos elementos singulares y que guardan la historia de Getxo, ha iniciado su recuperación. La Fundación Punta Begoña es la responsable de estas labores: ya ha puesto en marcha el acondicionamiento del conjunto, desarrollando el análisis previo del estado general, la identificación de ámbitos de actuación, las intervenciones de limpieza interior y del entorno, y los trabajos de jardinería tanto en los diversos espacios interiores como en las zonas afectadas de los muros y del foso.

La rehabilitación de este espacio fue la segunda propuesta más votada en los presupuestos participativos de 2025 y cuenta, para esta primera fase, con una inversión de 156.000 euros. El objetivo es que a lo largo del inminente 2026, todo este entorno pueda ser reabierto y reciba a visitantes, y que también se lleve a cabo una primera musealización divulgativa y el diseño de un plan de acción para establecer las claves de uso y disfrute social. Durante este 2025 se ha trabajado en el diagnóstico de estado y, a partir de verano, se intervino en el terreno de la limpieza y la jardinería, incluyendo en esta la eliminación de las partes que estaban dañando estructuralmente el monumento. De igual modo, los trabajos realizados a lo largo de estos meses han realzado la imagen exterior del fuerte y faro, pero también han contribuido de forma eficaz a evitar los daños severos que la vegetación empezaba a causar en los muros interiores y exteriores. En estos momentos, se abordan las labores de limpieza y jardinería en las zonas más próximas al acantilado, que presentan una especial complejidad.

El fuerte de La Galea fue construido en 1743 y llegó a ser una de las defensas militares más emblemáticas de la costa vizcaina. A lo largo de su existencia, ha tenido diversos usos, tanto militares como civiles. Estos aspectos históricos se expondrán también en el interior del fuerte mediante visitas guiadas y una musealización básica, tan pronto como su acondicionamiento y la definición de los protocolos de seguridad alcancen el grado de desarrollo preciso. Paralelamente, se elaborará un plan estratégico y de acción que definirá las utilidades y usos del monumento para su gestión sostenible y disfrute social.