Bilbao - Al Bilbao Basket le quedan doce encuentros para buscar una buena posición de cara a los play-offs de ascenso a la Liga Endesa, doce citas sin tregua dentro de un galimatías clasificatorio que apenas deja lugar para la relajación. Sea en casa o fuera, ante rivales con los mismos objetivos o con metas más modestas, las victorias están cotizadísimas y cada derrota supondrá un importante quebradero de cabeza. El primero de estos exámenes lleva hoy a los hombres de negro a rendir visita al Valladolid, un rival con tres victoria menos que cierra precisamente el grupo que a día de hoy jugaría las eliminatorias por el título y que después de perder sorprendentemente en la cancha del colista Prat la pasada jornada afrontará este duelo con ánimo de revancha.

Los pucelanos presentan un plantel bastante completo y en su banquillo se sienta un técnico veterano y con tablas en mil batallas como Paco García, por lo que cuenta con los mimbres necesarios para complicarle la vida a cualquiera. Como anunció ayer Álex Mumbrú, “el Valladolid es un equipo muy buen entrenado, sabe exactamente a lo que juega y saca el máximo provecho a cada jugador en cada situación. Nunca se desordena. Tiene un base como Óscar Alvarado que controla al equipo, anotadores como Greg Gantt o Álex Reyes que lo están haciendo muy bien en el perímetro y por dentro cuentan con Bradley Hayes, Seydou Aboubacar o Sergio De la Fuente. Es un equipo compensado. A priori no parecía que iban a estar arriba, pero lo están haciendo muy bien, están jugando muy bien a baloncesto”.

La preparación de este choque en el bando bilbaino se ha visto mediatizado por la ausencia de Kevin Larsen, que jugó ayer casi 38 minutos (13 puntos, 3 rebotes) con Dinamarca en la derrota por 79-74 ante Suecia. “Desde el club están intentando que llegue para el partido. Será difícil, pero a ver si lo conseguimos”, dijo el técnico del conjunto vizcaino, quien tiene planes alternativos en el caso de que no pueda contar con su pívot titular: “Jugaremos con dos cuatros, pasaremos un tres al cuatro, Ben (Lammers) podría contar con más minutos... Buscaremos la fórmula, pero no es lo mismo jugar con Kevin que sin él aunque esta semana nos hemos preparado. De todas formas, Valladolid ya jugó en Sevilla contra el Betis juntando a sus dos cuatros y casi ganaron”.

En su análisis del encuentro, Mumbrú apuntó que hoy medirán sus fuerzas dos equipos que basan su juego en la defensa aunque los pucelanos jueguen a bastantes más posesiones que los bilbainos, por lo que “será importante igualar su nivel físico”. Además, agradeció el hecho de que su equipo vaya poco a poco mejorando en su capacidad para romper los partidos para evitar así llegar a finales agónicos. “Antes hacíamos tres o cuatro minutos de buen baloncesto y otros peores... Teníamos picos de buenos y malos momentos y ahora cada vez son menos”, afirmó.

Un rival motivado Por su parte, Paco García se mostró optimisma sobre el momento de su equipo pese a caer la pasada jornada en la cancha del Prat. “Hay un factor motivacional que esta vez no tenemos ni que tocarlo para jugar contra el Bilbao Basket. Quiero pensar que estamos en disposición de competir el partido ante uno de los mejores equipos de la categoría. Al principio de la temporada todos teníamos claro quiénes iban a estar ahí arriba, solo faltaba el orden. El Betis va primero pero el Bilbao Basket continúa ahí, a rebufo, y eso es por algo. “La lucha por el rebote va a ser decisiva. Si jugamos a muchos puntos, no tendremos opción”, aventuró.