El fin de semana de carnavales dejó un rastro de desperfectos en las instalaciones del Zalla Unión Club que han llevado a la entidad a denunciar nuevamente el comportamiento de los vándalos. Incidentes del mismo tipo ya se produjeron en verano.

"Por lo visto, la moda actual consiste en acudir a la tribuna cubierta de Landaberri a hacer botellón y fumar, dejarlo todo hecho una auténtica pocilga y ya de paso divertirse rompiendo y arrancando las butacas. No acaba ahí la fiesta, porque también se dedican a cortar y quemar las redes de las porterías de ambos campos de fútbol así como las redes protectoras de Landaberri, además de causar otros daños", lamentan desde la entidad. El Zalla "sigue informando al Ayuntamiento y proponiendo medidas para poner freno a esta situación".