El Fair Saturday vuelve tras un año sin celebrarse debido a la pandemia. Será el día 27. Y lo hará sacando Bizkaia a escena, con varias novedades; entre ellas con música en el metro y un récord de participantes, ya que ofrecerá más de 300 actos culturales y solidarios en diferentes emplazamientos, en los que tomarán parte casi un centenar de organizaciones. Además, el Bilbao Arena de Miribilla acogerá un concierto con más de 1.600 colaboradores, entre ellos la Orquesta Sinfónica de Bilbao, ETS (En Tol Sarmiento), Idoia y Mäbu, la jornada previa. “La cultura tiene un valor social y económico”, destacaban desde la organización.

Tras un año de parón, Fair Saturday -movimiento cultural con impacto social- regresará este día 27 con “un día especial” para demostrar que “seguimos vivos y con más sentido que nunca”, según su fundador, Jordi Albareda. Idea surgida en Bilbao en 2014, busca ser “el contrapunto cultural al consumista Black Friday”, ya que cada una de las organizaciones culturales participantes en este “día de la cultura y la empatía social” elige una causa a la que reconocer su trabajo, ayudando a proyectar su mensaje y entregando una parte de los posibles fondos generados.

El programa de este año consta de más de un centenar de eventos repartidos por diferentes emplazamientos y localidades. El público podrá disfrutar de “una propuesta variada e intercultural” - describió Albareda- que incluye conciertos, exhibiciones, obras de teatro, performances y poesía, entre otras disciplinas. Además, este año se contará con novedades entre las que destacan Metro Akustikoa, en la que diferentes artistas (Sara Zozaya, Loida, Xabier Iriarte, The Last Hidden Fox o Myke) ofrecerán conciertos acústicos en las estaciones de Metro Bilbao, y unas charlas que realizarán artistas reconocidos como Mäbu o ETS para compartir con la juventud sus reflexiones sobre “el mundo artístico y experiencias personales”.

Fuera de Bizkaia y a pesar de las restricciones provocadas por la pandemia, la iniciativa se celebrará también en Huelva, Lisboa y en toda Escocia, con decenas de eventos en cada uno de estos lugares. Y, por vez primera, se sumará una comunidad autónoma, la de La Rioja, donde tendrán lugar una treintena de actos, principalmente en Logroño. “En el futuro, Fair Saturday pretende continuar su crecimiento internacional”, según Albareda, que reconoció que “la inestabilidad actual han provocado que algunas ciudades participantes hayan pospuesto su vuelta a 2022”.

Un día antes de la celebración del Fair Saturday, el viernes 26, en el Bilbao Arena de Miribilla y desde las 20.00 horas, volverá a tener lugar el habitual evento inaugural. Sus impulsores aseguraron que será “una producción musical y audiovisual de primer nivel” inspirada en La última noche de los Proms del Royal Albert Hall. “Será una celebración colectiva alrededor de la música, un espacio de encuentro a partir de la cultura y una cita que reunirá a decenas de organizaciones y cientos de artistas de Bilbao y Bizkaia”, aclaró Albareda.

Un gran mosaico de artistas participará en este evento el día 26 y formará “un impactante cuerpo escénico” alrededor de la Orquesta Sinfónica de Bilbao. Se compondrá de cinco coros principales de escenario, una veintena de corales del Territorio Histórico, siete coros infantiles, cuatro cuerpos de baile, un par de orquestas juveniles, cinco centros escolares, solistas y una serie de artistas invitados como Mäbu, Idoia o ETS. En total, unas 1.500 personas que interpretarán destacados temas musicales de estilos diversos. Las entradas están ya a la venta en el portal Evento Inaugural.

“Bizkaia saldrá a escena con Fair Saturday, que contará con un récord de participantes”, destacó la diputada de Euskera, Cultura y Deportes, Lorea Bilbao, para quien la asociación “nos centra e interpela sobre el papel de la cultura como individuos y sociedad”. Por su parte, el concejal de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, Xabier Ochandiano, destacó que la iniciativa es “una de las actividades más singulares” que se celebran en Bizkaia. “Nos hace sentirnos orgullosos, sirve para exportar cultura a otras ciudades y países, y demuestra que la cultura y el desarrollo económico deben ir de la mano”, concluyó.