La pandemia no ha podido con el tirón turístico de San Juan de Gaztelugatxe. Este jueves se reabren las visitas al emblemático lugar y la Diputación ha confirmado que son casi 3.900 las reservas efectuadas para los próximos meses. La mayor parte de esas reservas, 3.572, las han realizado personas procedentes del Estado y entre las que llegan del extranjero son mayoría las de Francia y Estados Unidos.

Los datos concretos es que con estas reservas podrán acceder al biotopo 12.600 personas, la mayoría de las cuales (11.640) proceden del Estado, principalmente de Madrid (2.238), Barcelona (1.728) y Valencia (847). Entre quienes llegan desde otros países, son mayoría las que lo hacen desde Francia (316 personas) y Estados Unidos (113).

Los visitantes no podrán hacer todo el recorrido, solo una ruta circular entre Urizarreta y Ermu sin llegar a la zona en la que se produjo el desprendimiento que originó el cierre de los accesos, después de que en esta zona se hayan adoptado las medidas de seguridad establecidas en el análisis realizado por el personal técnico en los últimos meses.

Los trabajos del segundo sector que se abrirá al público, entre Ermu y Lurgorri, se han iniciado ya, de manera que esta zona podrá recorrerse a finales de este mes. El camino que da acceso al islote y a la ermita, en donde se produjo el desprendimiento está previsto que se abra a principios de otoño.

MEDIDAS DE CONTANCIÓN

El lunes, la diputada de Sostenibilidad y Medio Natural, la alcaldesa de Bakio, el alcalde de Bermeo y la teniente alcalde de esta última localidad visitaron el enclave para conocer de primera mano el desarrollo de los trabajos que se están realizando en la zona para naturalizar el acceso por Ermu e instalar los elementos de contención del movimiento de la ladera diseñados tras el análisis realizado por el equipo de geólogos para evitar nuevos desprendimientos.

Estos especialistas detectaron también movimientos en esa zona al analizar el estado del conjunto de la ladera de Gaztelugatxe tras el desprendimiento del mes de enero en la zona opuesta del enclave protegido. Para evitarlo se van a tomar medidas centradas en la canalización del agua subterránea y la instalación de elementos estabilizadores del terreno.