NO hay Satanás ni Belcebú que les supere. Ni siquiera el célebre Pedro Botero, con su batería de legendarias calderas allá en el infierno, es competencia que les preocupe. No por nada, el Servicio Técnico Arnaiz rige los destinos de las calderas Junkers aquí en Bizkaia con mano perita y experta. No por nada son capaces de devolverles la vida a las malheridas calderas con su ciencia reparadora; de darles aire y vuelo, pura inyección de energía, con los recambios oportunos; de sostenerlas en pie con el mantenimiento preciso. Son los descendientes de Panoramix, el mago de las calderas en aquella irreductible aldea, tierra natal de Astérix.

Ayer, cuando la empresa que ejerce de Servicio Técnico oficial de Junkers, todo un sello de calidad del grupo Bosch en el campo de las calderas, presentó sus nuevas instalaciones aparecieron en escena los hombres que rigen sus destinos, desde Xabier Arnaiz a Jon Ander Ansareo, pasando por José Fausto Martínez, Karmelo Arnaiz y Mario Arnaiz. 27 años después de la primera persiana arriba, mantiene una vigorosa musculatura en el sector y guardan el debido respeto a los padres fundadores de este sueño (cualquier empresa al nacer tiene, entre sus materias primas esenciales, la ilusión...), a Luis María Arnaiz, ya retirado de la primera línea de fuego; a José Ansareo, al que la vida se le apagó antes que el sueño, o al propio José Fausto, sin olvidar a Elena Herrera, quien mantuvo la sala de máquinas de las oficinas hasta que murió. A todos ellos les agradecieron aquel empuje, aquel viento de salida que les trajo hasta donde hoy se sitúan, en la cumbre de su sector.

trabajo en común No es la suya una labor de lobos solitarios sino el fruto de un trabajo en común. Ayer pudo comprobarse en la calle Amadeo Deprit, de Begoña, donde instalan sus reales. Por allí pasaron un buen puñado de hombres fuertes del grupo Bosch como David López, Francisco Prieto, Inés Gurtubai, Iñigo Ruiz de Eguino, José Miguel Padilla, Juan Carlos Siemes y Javier Pérez, así como trabajadores y técnicos de la casa como David Fernández, Vanesa González, Itxaso Lamas, Rubén Aguilera, Arturo Sanz, Ibon Blanco, Ibon Moreira, Jon Vázquez, Unai Ibáñez, Joserra Somarriba, Óscar Herrezuelo, Jesús Martínez, Sergio Tena, Unai Martínez, Pascual Bernal, Álvaro Jorge, Oskar Guerra, David Rodríguez, Fernando Hurtado, Koldo Bautista, Aitziber Marín, José González, Aitor Rico, Israel Pérez y Pedro López, entre otros, sin olvidarse a Javier Ayarza, otro de los engranajes de esta fabulosa maquinaria.

Porque ese el gran secreto de esta historia, el poder que les sujeta. En un universo como en el que ellos orbitan, bañado con el polvo de estrellas de la tecnología, han hecho del capital humano su gran tesoro, la herramienta que les distingue y les fortalece.