El Athletic comparecerá mañana en el remodelado Campo Nou, que todavía está inconcluso, ante el Barça sin complejos y con la idea de sacar algo positivo, un hecho que no se produce desde siete años atrás, cuando el equipo entonces dirigido por Eduardo Berizzo araño un punto (1-1). Ernesto Valverde, además, no sabe lo que es ganar en feudo culé como entrenador, una estadística que reconoce, y que la justifica en su particular reflexión: “Cuando no consigues ganar en un campo durante el tiempo, es por algo. Obviamente, por el potencial que ha tenido, por la diferencia de potencial que ha habido entre un equipo y otro durante un tiempo que son cada vez más grandes por la diferencia de presupuesto, pero no solo nos ha pasado a nosotros, sino también a otros equipos”.
Valverde, que recupera a un Oihan Sancet ya rehabilitado de sus molestias musculares, ha afrontado el parón competitivo para recuperar jugadores y con el objetivo de “reforzar lo que nos ha ido bien, aunque siempre quieres corregir esos errores puntuales”, por lo que no descarta hacer caja en el feudo culé en el inicio de un tramo final de este 2025 muy exigente, con nueve partidos en 30 días. “Es un momento decisivo, con partidos muy seguidos, complicados por los rivales que son. La liga la empezamos muy bien, luego tuvimos bache, pero venimos de ganar el últimos partido y estamos en condiciones de competir. Somos el Athletic, un equipo difícil de ganar y así lo tenemos que aplicar”, ha añadido el técnico, al que no le inquieta cómo le puede recibir a Nico Williams la afición azulgrana tras el affaire del último verano: “No sé cómo le va a recibir el Camp Nou, la cuestión es cómo le vamos a recibir a nosotros, que le recibimos con los brazos abiertos. El otro día ya participó, vamos a ver mañana cómo llega. Es verdad que va entrenando regularmente y lo que me interesa es que esté al cien por cien”.
Valverde ha dicho que no le ha condicionado la incertidumbre sobre el estadio en que se jugaría la cita de mañana, ya que “lo que me condiciona es lo que pase dentro del césped” y ha subrayado que el Barcelona de Hansi Flick “le veo como el año pasado, con mucho nivel, con una gran pegada. Según va pasando el tiempo, los equipos saben cómo jugarle, cómo combatirle, pero tiene calidad para sacar juego e impedir que lo hagas tú con una presión muy fuerte que te aboca a jugar cerca de tu área y le hace peligroso por la calidad que tiene”.
El txingurri, en este mismo sentido, reconoce la importancia de las bajas de los culés Pedri y Frenkie de Jong. “ Pedri es un jugador determinante, pero tiene jugadores suficientes como para poderles suplir, pueden jugar con Fermín y Del Olmo, en el juego por dentro, pero también son importantes las bajas que tenemos”, ha asegurado Valverde, que no mira más allá del partido de mañana, aunque el martes se juegue su futuro en la Champions ante el Slavia en Praga: “Pesa más el partido que tienes por delante, es un partido de liga en el que podemos sumar puntos y nos tenemos que centrar en él”.