- El Sevilla, sin margen de error en su particular carrera hacia el título de liga, cayó derrotado a manos del Athletic en un partido que resolvió Iñaki Williams sobre la bocina. El tanto rojiblanco dejó abatido a Julen Lopetegui, quien lamentó en rueda de prensa la derrota y, sobre todo, el posible penalti por mano de Mikel Balenziaga que no señaló el colegiado del encuentro.
"Todos hemos visto la jugada y tengo una opinión clarísima sobre el tema, pero yo no decido, lo hacen los árbitros y el VAR y el Sevilla ha tenido muy mala suerte esta vez. Ahí lo dejo y prefiero no decir mucho más", afirmó indignado el entrenador del conjunto hispalense, quien no pudo reprimirse y añadió al respecto que "la mano de Balenziaga ha sido clarísima, pero no he pedido ninguna explicación al árbitro".
"Al término del partido he ido al centro del campo, le he dado la mano, me ha dicho que habláramos dentro y me ha sacado tarjeta amarilla sin que le hiciera la más mínima observación de nada. Me ha sacado la quinta amarilla y no puede decir que haya algo más, por lo que no me he merecido esa tarjeta", lamentó asimismo Lopetegui, quien confesó que "estamos tristes por perder tres puntos que creo que merecimos, porque hasta el minuto 75 hicimos un partido muy bueno ante un equipo en el que su mejor jugador fue el portero"."En los últimos minutos nos pudo más el corazón que la cabeza y nos marcaron ese gol que nos deja tristes al habernos ganado por derecho propio tener la ilusión de optar a cosas muy bonitas, pero hemos perdido entre la falta de acierto, el acierto del portero rival y algunas decisiones arbitrales en las que hemos tenido muy mala suerte", resumió el de Asteatsu, quien subrayó que "ahora toca levantarse".
