I el domingo fue el Athletic el equipo que superó todas las expectativas al adjudicarse la Supercopa de manera brillante tras superar en apenas 72 horas a Real Madrid y Barcelona, el jueves será la Unión Deportiva Ibiza la que perseguirá su particular gesta copera a costa de los leones. El conjunto balear, verdugo del Compostela en primera ronda del torneo del K.O. y de un Celta al que goleó sin compasión (5-2) después para colarse en los dieciseisavos de final, se ha conjurado para intentar dar continuidad a un sueño del que se niega a despertar.

Conscientes de la dificultad de imponerse al actual campeón de la Supercopa, los hombres dirigidos por el riojano Juan Carlos Carcedo confían en sacar de nuevo tajada del factor campo para colarse en octavos con una nueva hazaña de por medio. "Queremos seguir creando historia", advertía este mismo lunes el propio club a través de sus redes sociales, vía que aprovechó también para felicitar al Athletic por su reciente título al señalar que "será un honor recibir al campeón de la Supercopa en Can Misses. ¡Enhorabuena, Athletic Club!". El jueves, sin embargo, las felicitaciones y la cordialidad pasarán a un segundo plano cuando el balón eche a rodar en un terreno de juego de césped sintético al que deberán adaptarse los futbolistas de Marcelino García Toral.

En el vestuario ibicenco, mientras tanto, reina el optimismo y la ilusión. La motivación, de hecho, no ha hecho sino dispararse y multiplicarse en las entrañas del club balear tras el mayúsculo éxito de los leones, que tendrán enfrente a un equipo que a punto estuvo de sorprender el pasado curso al Barcelona en Copa y que figura en la actualidad como líder invicto de su grupo en Segunda B tras diez jornadas. Primero con siete puntos de ventaja respecto al Hércules, segundo en la tabla, e invicto hasta la fecha en el subgrupo B del grupo III con quince goles a favor y solo uno en contra, el Ibiza puede presumir de no haber encajado ningún tanto en sus seis últimos compromisos ligueros. En la matinal del domingo, mientras el Athletic velaba armas para medirse al Barcelona, el equipo presidido por Amadeo Salvo, expresidente también del Valencia, vencía por la mínima al Levante Atlético gracias a un solitario gol de Sergio Cirio para afianzar así su liderato.

El Ibiza, no en vano, asoma como el conjunto más en forma de la categoría de bronce. El técnico argentino del Celta, Eduardo Coudet, puede dar cuenta del nivel de una plantilla humilde, pero decidida a buscar el ascenso a Segunda División. "Yo me hago responsable de la parte más pesada, que es el resultado, pero todos nos tenemos que hacer responsables de un resultado que fue muy malo por las formas", lamentó tras su sonada eliminación el entrenador del Celta.

apuestan por pasar

Tal es el grado de confianza en el seno del Ibiza, que el guardameta Kellyan García, quien debutó el domingo en la citada victoria ante el filial del Levante, declaró al Diario de Ibiza que su equipo "apuesta" por pasar la eliminatoria frente al Athletic. "Muchos amigos me llaman loco, pero es que apostaría a que el Ibiza va a pasar. Convivo con mis compañeros, los veo competir y entrenar y es un equipo de la hostia, con perdón. Estamos entregados y concentrados", precisó el portero, sabedor de que en la isla vecina de Formentera ya saben lo que es eliminar al Athletic de la Copa al lograrlo en la campaña 2017-18, cuando el entonces equipo también de Segunda B ganó a los bilbainos en San Mamés (0-1) tras el 1-1 que reflejó el partido de ida en otro campo de superficie sintética.