Bilbao - Qué bonito es ir a ver una final de Copa. Y qué caro. Los aficionados del Athletic y de la Real Sociedad que quieran desplazarse hasta Sevilla para ver el derbi del próximo 18 de abril deberán rascarse el bolsillo. Y es que cuando el jueves por la noche se supo que los de Gaizka Garitano estarán de corto en La Cartuja, los precios de los hoteles de la capital andaluza atravesaron las nubes y tocaron el cielo. Pero no solo pernoctar costará un pastizal, ya que el simple hecho de llegar a Sevilla será también una odisea costosa. De hecho, el valor de los billetes de avión de las aerolíneas que cubren el trayecto Bilbao-Sevilla se triplicó justo en el momento en el que Yuri perforaba la portería de Rui Silva. La ley del mercado. La oferta y la demanda. Porque la Giralda recibirá a 42.000 hinchas vascos con entrada y otros miles sin ella, así que la subasta por los pocos dormitorios libres que quedan ya ha comenzado. Es más, la Junta de Andalucía cifra el impacto económico de esta final de Copa en 43 millones de euros y los hosteleros sevillanos se frotan las manos con un derbi que aterriza en el Guadalquivir justo una semana después de Semana Santa y siete días antes del inicio de la Feria de Abril.

De esta forma, desde que Del Cerro Grande pitara el final del encuentro frente al Granada, las web de los buscadores de alojamiento están echando humo. Y eso que en todas se avisa que "el 99% por ciento de los alojamientos en Sevilla para el 18 de abril ya no están disponibles". Por ello, ese 1% restante es prohibitivo. Así, en estos momentos, el hotel más barato en el centro histórico de la capital andaluza cuesta 257 euros por persona. Tan solo una noche. Pero es que los precios pueden llegar hasta los 900 euros y el valor medio de las habitaciones todavía sin ocupar ronda los 500 euros. Para aquellos que opten por alquilar un apartamento entero las cantidades no son mucho mejores. Y es que el más barato estaría ya en los 400 euros por persona y algunos caseros piden hasta 2.000 euros por noche e individuo. Pero es que para los bolsillos más estrechos que se deciden por los hostales o los albergues, las cifras también duelen. Y mucho. 420 euros por una habitación con baño compartido y 224 por una con otras diez camas.

Con todo, conseguir alojamiento a un precio moderado no es la única utopía a estas alturas de Copa. Desplazarse hasta Sevilla también es una fantasía para las carteras con poco fondo. De hecho, las compañías que unen San Mamés con La Cartuja triplicaron el precio de sus vuelos para el 18 de abril, por lo que los aficionados rojiblancos que quieran ir a Sevilla por el aire deberán pagar un mínimo de 336 euros por un boleto de ida para el sábado y otro de vuelta para el domingo. Otra opción más económica pero también más tediosa es el autobús. 84 euros y 13 horas de trayecto para ver al Athletic en su cuarta final desde 2009. Sin embargo, la más asequible para los monederos vizcainos parece ser el tren. Renfe oferta un viaje de 9 horas y media, con transbordo en Madrid, por 66 euros. Eso sí, solo la ida. Porque la vuelta ya tiene todos sus asientos agotados.

Las alternativas La escasa oferta disponible a estas alturas y el desorbitado precio de las vacantes ha provocado que tanto los aficionados del Athletic como los de la Real Sociedad, club que augura una amplia marea txuri-urdin después de estar 32 años sin una final, busquen alternativas a Sevilla. Málaga, Córdoba o pequeños pueblos de alrededor de la capital andaluza son los destinos más plausibles para los miles de seguidores vascos que quieren ver la final sin rascarse mucho el bolsillo. Asimismo, ya son muchos los socios que, sin saber todavía si tendrán entrada, se están organizando en coches o en autobuses alquilados para la ocasión. Una forma de viajar mucho más económica ya que acudir a Sevilla en el vehículo propio supondría alrededor de 80 euros y unas 8 horas y media.