Después de los PGE, llega el turno de las Cuentas vascas. ¿Confían en lograr más apoyos que los de la coalición de Gobierno?

—Esta vez tenemos suficiente apoyo parlamentario. A veces se lee como un rodillo, pero a mí me gustaría alzar la voz por aquellos votantes que nos han dado a la confianza a partidos que, uniéndonos, hemos conseguido la mayoría absoluta. Porque eso significa que representamos a una parte amplia de la sociedad. Dicho lo cual, nosotros como partido siempre hemos intentado llegar a algún acuerdo con la oposición. Creo que el acuerdo que se consiguió el año pasado con Elkarrekin Podemos es un modelo muy válido a seguir. Este año tenemos que hacer un esfuerzo máximo y, con que EH Bildu y Podemos mantengan el espíritu que han tenido con respecto a los PGE, tendría que haber una opción para el acuerdo.

La actitud de Bildu en el Estado y Nafarroa indica que deberían, al menos, abrirse a negociar en la CAV.

—Sí, el jueves Otegi habló de coherencia y, apelando solamente a sus palabras, la coherencia más grande sería intentar llegar a un acuerdo de verdad también en los Presupuestos vascos. Y digo acuerdo de verdad, porque creo que a veces han jugado a participar sabiendo que en el límite dirían que no porque era más una postura política que de partidas públicas. Pero la línea que han marcado en Madrid y en Iruñea debería ser positiva y no va a faltar mano tendida del lehendakari, de Azpiazu y, desde luego, del PSE que forma Gobierno con nosotros.

En el otro lado del arco parlamentario, ¿se puede contar para algo con este PP vasco?

—Yo llevo días atónita porque todo el mundo habla del supuesto cambio del PP y yo no lo veo en ningún ámbito. No lo veo en Madrid y en el PP de Euskadi el cambio a Iturgaiz no ha mejorado absolutamente nada. Tienen una Ejecutiva a imagen y semejanza de Iturgaiz y Casado y quizás en Bizkaia ha habido una querencia hacia un PP todavía más duro, en la línea de Cayetana Álvarez de Toledo. Vemos a una Bea Fanjul que es la derecha de Pablo Casado y que posiblemente vaya a ser la líder de las Nuevas Generaciones a nivel estatal. Más allá de eso, me importa si están o no dispuesto a participar en la vida institucional de este país. Esa derecha que ellos llamaban vasquista, históricamente ha colaborado en Juntas Generales, ayuntamientos o en el Parlamento Vasco. Me gustaría ver otro PP en Euskadi, porque creo que tienen un hueco con el que pueden participar.

¿Cómo hará frente Euskadi al elevado endeudamiento que ha conllevado la pandemia?

—Va a ser muy complicado, hay situaciones económicas difícilmente reversibles. Por eso es tan importante el tema de las ayudas europeas, porque la apuesta es muy seria, por el montante económico y porque intentan que se vaya a invertir en aquello que de verdad genere y regenere la economía en cada una de las zonas. Y creo que Euskadi está bien posicionada.

En cuanto a autogobierno, ¿la aspiración del PNV es completar por fin el Estatuto y avanzar hacia el nuevo estatus?

—El trabajo de avance hacia un nuevo estatus tiene como primera objetivación elaborar un nuevo Estatuto. Mientras tanto, hay que ir llenando de contenido lo que le falta al Estatuto de Gernika. Pero el nuevo estatus hay que retomarlo, y hay años de trabajo muy articulado y muy serio en el Parlamento Vasco en ese sentido, con acuerdos diferentes. El nuestro con EH Bildu fue importante, un acuerdo al que casi se sumó Podemos. A lo mejor es el momento de ver si esa mayoría se puede ampliar. Pero vimos que, después de haber acordado esas bases, Bildu se las saltó a la torera y planteó incluso un texto independiente y sin consenso Nadie nos dijo que esto iba a ser fácil, pero es un proceso en el que no vamos a cejar.

"Si EH Bildu y Podemos mantienen el espíritu de los PGE, tendría que haber una opción para el acuerdo en Euskadi"

"Las ayudas europeas son muy importantes, la apuesta es seria y creo que Euskadi está bien posicionada"

"El nuevo estatus hay que retomarlo, y hay años de trabajo muy articulado y muy serio en el Parlamento Vasco en ese sentido"