El verano ya casi está aquí y para muchos implica viajar. Pasamos más horas y recorremos más kilómetros dentro de nuestro coche y, por eso, las posibilidades de sufrir una avería aumentan. Es más, según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), 1,7 millones de vehículos experimentan cada año algún tipo de incidencia en este tipo de desplazamientos. Entonces, ¿qué medidas podemos tomar para prevenir estas situaciones y, además, ahorrar combustible al conducir de forma más eficiente?

Tráfico recuerda los diez elementos clave que debes revisar antes de enfrentarte a un viaje largo de carretera:

1- Dirección. Si los neumáticos están desgastados de forma irregular o el volante está más duro de lo normal, pueden ser indicadores de que la dirección necesita ser revisada.

2- Frenos. Es necesario comprobar que las pastillas y los discos de freno no estén gastados, así como asegurarse de examinar el líquido de frenos.

3- Suspensión. Aunque su deterioro es difícil de reconocer, es importante tenerla en cuenta porque de ella depende la estabilidad del vehículo y su capacidad de frenar.

4- Neumáticos. Al ser el punto de contacto entre nuestro coche y la carretera, es fundamental comprobar que las ruedas no están desgastadas, pinchadas o con una profundidad del dibujo inferior al 1,6 mm ya que, de lo contrario, habría que renovarlos.

Es más conducir con un grosor del dibujo por debajo de lo establecido supone una infracción grave e implica, en consecuencia, una multa de 200 euros por cada neumático en mal estado.

Pero, ¿cómo podemos reconocer si los dibujos cumplen o no con la normativa? La Guardia Civil ha publicado un tuit en el que explican un sencillo truco: meter dentro una moneda de un euro y, en caso de que la parte dorada siga siendo visible, cambiarlos por unos nuevos.

También hay que tener en cuenta si la presión a la que se encuentran corresponde con la que recomienda el fabricante: este elemento no solo aporta seguridad en la conducción sino que ayuda a ahorrar combustible.

5- Luces. Debemos asegurarnos de que el sistema de luces y los indicadores de dirección funcionan correctamente. Además, hay que tener en cuenta la altura de los focos para garantizar una buena visibilidad y evitar deslumbrar al resto de conductores.

6- Batería. Desde Oscaro recomiendan encender el vehículo varias veces y verificar que no aparece ningún piloto de avería en el cuadro de mando. También deberíamos asegurarnos de que el voltaje de la batería se encuentra entre 12,5 y 12,9.

7- Aceite. Conocer el nivel del aceite puede ayudarnos a evitar averías en el motor. Y es una tarea muy sencilla: con el motor apagado y en frío, abrimos el capó y extraemos la varilla que mide sus niveles con dos líneas: el máximo y el mínimo. Si la marca se encuentra entre ambas, el nivel de aceite es el correcto. En caso contrario, si la mancha está por debajo del mínimo, es necesario rellenarlo hasta alcanzar la cantidad adecuada.

8- Aire acondicionado. Esta función, además de aportar confort, ayuda a garantizar la seguridad en el vehículo al reducir las distracciones que pueden provocar los sofocos, por ejemplo. La DGT recomienda cambiar el sistema de aire acondicionado cada dos años y mantener el interior del vehículo en una temperatura entre los 22 y 24 grados.

9- Lunas y limpiaparabrisas. El estado de las escobillas de los limpiaparabrisas, traseros y delanteros, y el nivel de líquido de sus depósitos son elementos clave para garantizar una buena visión de la carretera.

10- Inyección. Es recomendable revisarla si experimenta aumentos del consumo o tirones al arrancar o en marcha.