jUNTO a Aretxabaleta y a los pies del monte Kurtzebarri (1.146 m), aparece el paisaje bucólico del embalse de Urkulu, un remanso natural que ofrece al visitante un amplio paseo de varios kilómetros, un bidegorri y, además, permite la práctica deportiva al aire libre y pasar un día en familia. Cerca, se puede visitar Aretxabalete, municipio de Debagoiena de carácter industrial pero que todavía conserva un interesante conjunto monumental en su casco.

El paisaje resulta espectacular en el pantano de Urkulu, en el interior del territorio histórico de Gipuzkoa, a pocos kilómetros de Aretxabaleta. Se trata de uno de los principales atractivos naturales del municipio, pues ofrece al visitante un entorno realmente apropiado para relajarse y disfrutar de la naturaleza.

El paseo por sus alrededores es de casi siete kilómetros, la misma distancia que ofrece su bidegorri. Espacio propicio para descansar y también para practicar deporte al aire libre, cuenta con varios lugares para hacer gimnasia, con paneles explicativos que indican cómo realizar algunos ejercicios. El embalse también presenta un servicio de alquiler de piraguas, además de merendero con fuentes y papeleras.

Y si el fin de semana da para más, la localidad de Aretxabaleta, situada a escasos kilómetros, conserva un interesante conjunto monumental en su casco en el que destaca la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. También resulta sorprendente la cripta de la antigua iglesia de San Miguel de Bedarreta y los turistas suelen visitar el palacio de Otalora y la casa torre de Arratabe, sede del Ayuntamiento.