Tras la durísima noche vivida por los vecinos del número 17 de la calle La Torre de Barakaldo, edificio que se vio pasto de las llamas tras producirse un incendio en dos arquetas y que acabó alcanzando este portal ocasionando graves daños en cuatro viviendas, este martes ha tocado evaluar los daños con precisión, en el caso de los pisos más dañados recoger pertenencias y lidiar con los seguros.
La imagen a lo largo de toda esta mañana ha sido la del patio interior acordonado mientras los operarios realizan las labores para tratar de que el edificio tenga luz y gas a la mayor brevedad, mientras que en la parte delantera del portal los vecinos esperaban para acceder a sus hogares y recoger todo aquello que necesiten.
"Vimos la llamarada de fuego y nos entró por el salón"
Víctor Calleja vive en el primero izquierda de este portal y su casa ha sido muy dañada por el incendio, de hecho, la pasada noche la pasó junto a parte de su familia en el Frontón Barakaldés. “De pronto, vimos la llamarada de fuego y nos entró por el salón. Lo primero que hice fue coger a mi nieto en brazos y salir corriendo hacia la calle. Llamé a los telefonillos para que bajaran rápido para que nos salvásemos todos. No sabíamos fijo lo que había”, recuerda Víctor, quien a primera hora de la mañana ha podido entrar a su casa para coger ropa y rescatar aquellas cosas que no se han quemado.
Un hogar es toda una vida llena de recuerdos y Víctor y su familia han perdido muchos recuerdos. “En el salón no ha quedado nada, está todo destrozado. He entrado a casa con la intención de coger la foto que tenía de mi mujer y está completamente quemada. Es lo que más me ha dolido”, ha señalado Víctor, quien ha hecho las primeras gestiones con el seguro, de momento, sin éxito. “Aún no sabemos dónde vamos a pasar la noche”, ha indicado.
"Me encontré todo quemado"
El ala izquierda del edificio ha sido el más afectado por las llamas. José Pedro Ruano vive en el segundo izquierda y no estaba en casa cuando comenzó el incendio. “No estaba en casa y me avisaron mi mujer y mi hijo. Cuando llegué estaba todo acordonado y ya se había quemado todo. A la luz del día impresiona más todo lo que ha pasado. Esta noche he estado en casa de mi madre y aún no tenemos ninguna otra solución”, ha indicado José Pedro.
En una casa hay invertido mucho dinero, muchas ilusiones y mucho trabajo. “Yo soy albañil y esta casa me la he hecho yo. Así que te puedes imaginar lo que duele todo lo que ha pasado. Las ventanas llevan puestas tres meses, con eso te lo digo todo. Lo importante es que no nos ha pasado nada”, ha reconocido este vecino del portal 17 de la calle La Torre.
Coberturas de seguros
Desde el Consistorio fabril también se ha trabajado para activar las coberturas del seguro de la comunidad de vecinos. Ahora, lo más inmediato, es que las personas que residían en las viviendas más afectadas encuentren un alojamiento estable. “Ahora estamos pendientes de la respuesta que vayan dando los seguros y nos mantendremos en contacto con los afectados y si necesitan algún tipo de ayuda por nuestra parte se la daremos. Si no les dan un alojamiento estable, buscaremos alguna alternativa habitacional, de hecho es algo que ya estamos barajando ya”, ha detallado Antizar.