L colegiado castellano-manchego afiliado al Colegio Riojano le podemos dar un notable por su actuación en el José Zorrilla. Fue el primer partido que Soto Grado dirigió al Athletic en su temporada de debut en Primera División. No se complicó en ningún momento la vida, siguió el juego de cerca durante todo el encuentro, estuvo neutral con sus decisiones y acertó en las acciones que decantaron el partido. Como en el minuto 17, tras el grave error de Unai Simón en la cesión. El portero del Athletic no acierta a controlar el balón y tras perderlo, intenta recuperarlo pero derriba dentro del área a Marcos André. Soto Grande no se equivocó al señalar penalti y en mostrar tarjeta amarilla al portero rojiblanco, ya que hizo por intentar recuperar el esférico. Hubiese visto la tarjeta roja si se habría despreocupado del balón, con el único objetivo de derribar al contrario. El colegiado también actuó de forma correcta en el minuto 82, en la pena máxima a favor del Athletic. No hay duda de que Luis Pérez derriba a Yuri sobre la línea del área. El penalti es claro y el VAR le ayudó a la perfección al árbitro. Y para terminar quiero apuntar un dato que a mí, al menos, me preocupa. En las dos últimas ocasiones que Villalibre y Williams han coincidido sobre el terreno de juego, este último no le ha pasado al gernikarra. Algo que ha quedado patente en la jugada en la que Iñaki ha encarado a Masip. Tenía solo a Asier en la izquierda desmarcado para empujarla.
