Demasiada víscera para el primer día
La actualidad ofrece variedad de puntos de atención a los que dedicar un bisturí que la diseccione; pero el forense está condenado a mancharse las manos
Debe de ser un sarcasmo del destino arrancar con una sucesión de asesinatos esta sección que aspira a hacer una autopsia diaria a la actualidad. No es el mejor augurio para la salud mental del autor y los eventuales lectores comenzar viviendo el escalofrío. Si horrorizados nos dejó el domingo la muerte de un joven de una puñalada en Bilbao, no sabría calificar la beatificación del asesinado proselitista ultraconservador Charlie Kirk. Lo dicho, lo hecho, lo visto y la proclamación de su martirio en Arizona es el tipo de exaltación que alimentó varias yihad y cruzadas en el pasado.
Si el martirio de civiles en Gaza tampoco justifica una barbaridad en su nombre, no es menos triste la sensación de que ninguna medida razonable y razonada, ni siquiera el reconocimiento de Palestina, va a servir para detenerlo. La gran agresión de los Trump, Netanyahu, Putin, Orban, Jinping, Maduro y un largo etcétera, a la humanidad es la imposición de intereses particulares sobre principios colectivos. Individualismo del más fuerte.
Eso no trae Justicia, claro, y cuando se pretende no hay quien la imparta. Lo dice el presidente del Superior de Justicia de Navarra y antes otros. Faltan jueces y letrados; faltan policías y bomberos; faltan profesores y sanitarios en un mundo que se ha dividido entre funcionarios e influencers y sus audiencias. Elijan bando o carrera.
Al Gobierno español le faltan técnicos que resuelvan las transferencias a Euskadi antes de fin de año. Los del Vasco les han adelantado trabajo, pero ni así. Y faltan informáticos que garanticen que las pulseras antiviolencia funcionan.
Igual lo que sobran son máquinas de ruido. La verdad ya no mola, si alguna vez existió. Para todo hay tantas versiones como intereses. No se puede fiscalizar el poder sin veracidad. La fiscal del Supremo pide absolver a García Ortiz como el instructor pide condenarlo y el criterio de ambos no recibe más valor que cualquier opinión. Jolín, esto el primer día y sin hablar del novio de Ayuso al banquillo.
La gota que colma
Soplando y sorbiendo al Sabadell
El BBVA mejora la oferta. El banco vasco le reconoce un valor un 10% superior al Sabadell. La opa llega a su final y toca recoger las redes y ver la captura. Curioso fenómeno éste de sorber un banco a otro mientras hay quien se dedica a soplar el globo en Bolsa para que ambos se inflen más. No sé si hoy el banco catalán es mejor que hace un año ni si el vasco es menos cicatero en su valoración. Sí parece que es un negocio morrocotudo llenar las acciones de gas en los mercados, pero quizá debería preocupar por dónde saldrá tanto aire cuando toque. Puede reducirse a un enorme eructo o salir por un sitio peor.