AS informaciones sobre la evolución de la milagrosa vacuna que supuestamente nos devolverá a la vieja normalidad y sus dientes de sierra -ayer, la Universidad de Oxford anunció que reanuda los ensayos: buena noticia- no se nos debe olvidar que en las pruebas participan cobayas humanas que se prestan a que les inoculen la sustancia en cuestión con la incertidumbre de los resultados. Son 18.000 voluntarios solo en la experimentada por Ox-ford. La seguridad y la salud de todos -incluso de los an-tivacunas- depende de ese pequeño o gran sacrificio. Les debemos gratitud.