El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria ha llamado a participar en las movilizaciones convocadas este martes 15 de junio en las capitales y municipios vascos para denunciar el maltrato a la vejez durante la pandemia y en defensa de unas pensiones públicas.

Así lo han trasladado a los concentrados durante las movilizaciones que llevan a cabo todos los lunes desde enero de 2018. El motivo de estas protestas es la celebración, el 15 de junio, del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, fecha establecida por la ONU en 2006 a fin de sensibilizar a la ciudadanía y denunciar las injusticias y sufrimientos que padecen muchos mayores de edad avanzada en todos los países del mundo.

Con su llamamiento a secundar las movilizaciones previstas para esa jornada, en especial las previstas en la Margen Izquierda de Bizkaia, la plataforma de pensionistas ha trasladado que tratan de "aunar con este gesto las tradiciones populares, el valor del trabajo realizado en nuestra vida laboral, las demandas del colectivo de pensionistas y el respeto que merecemos como personas".

En ese sentido, han añadido que cuando en enero de 2018 iniciaron sus movilizaciones no podían imaginar que esta acción reivindicativa "llegaría a convertirse en un movimiento global contra tantas penurias y afrentas que afectan a las personas mayores".

Desde su perspectiva, sus movilizaciones han contribuido a "recuperar derechos y libertades, fortalecer servicios esenciales como la sanidad, la enseñanza o las pensiones, pilares básicos del estado de bienestar y de la justicia social".

Sin embargo, avances como "vivir más y mejor, la asistencia personalizada o la economía de los cuidados, son logros a compartir con las demás generaciones" para lo que "es preciso rechazar toda forma de violencia y de discriminación, contra cualquier persona, tanto en la infancia como en la juventud, en la edad adulta o la vejez".

En este contexto, "las pensiones mínimas o la brecha de género que afecta sobre todo a las viudas, son otra forma de abuso y de maltrato en la vejez", asegura la plataforma.

Otra amenaza, en su opinión, es "favorecer" la implantación de pensiones privadas, denominadas EPSV en Euskadi, en perjuicio de las pensiones públicas. Para evitar esos "agravios" y reducir las desigualdades sociales, "hay que empezar por equiparar la pensión mínima con el salario mínimo".

CRITICA 'EDADISMO'

Dentro de su denuncia del trato dado a los mayores, los representantes del movimiento han leído parte del comunicado que han hecho público con motivo del 15 de junio, y en el que denuncian el creciente peso del denominado "edadismo".En su opinión, este edadismo presente en la sociedad "significa desprecio a los mayores, margina, discrimina, aísla, excluye y rechaza a personas en la fase final de la vida".

Además, tiene "múltiples formas de expresión" y, desde que se declaró la pandemia, se ha aplicado de forma delictiva en las residencias geriátricas, convertidas en tanatorios, mientras en los hospitales se rechazaba el ingreso de ancianos en las UCI.

A su juicio, edadismo también es "ampliar la brecha digital en las gestiones con la administración y entidades bancarias y faltar a la dignidad y al respeto, infantilizando a personas de edad avanzada". "Edadismo es castigar al sector más vulnerable de la sociedad, que tanto ha contribuido al bienestar colectivo, privándolo de medios de subsistencia suficientes para poder afrontar los últimos años de la vida", han añadido.

BABESTU

Por su parte, la Asociación de Familiares de Mayores Residentes en Residencias de Bizkaia se ha adherido a las movilizaciones previstas este martes a través de un comunicado donde también llaman a este colectivo a sumarse a las convocatorias anunciadas en las capitales vascas y municipios de Euskadi.

En dicho comunicado, Babestu ha denunciado que durante la pandemia, los mayores han sufrido "de manera inadmisible el maltrato institucional en los centros residenciales". En su opinión, estos centros residenciales han sido centros de internamiento y focos permanentes de contagio para residentes y trabajadoras "por la dejadez, los recortes y la improvisación".

En ese sentido, han alertado de que "maltrato son también, las pensiones de miseria a las que se ven abocados miles de personas tras una vida de trabajo o bien no reconocido o precario, especialmente las mujeres".

Maltrato también son "los recortes que se siguen aplicando en los servicios públicos, especialmente los sanitarios y los de atención y cuidados, que han reducido la calidad de los servicios, las posibilidades de una atención personal adecuada y las condiciones de trabajo".

En ese sentido, para la asociación de familiares de residentes de Bizkaia, "muchas personas mayores y pensionistas no pueden mantener su casa en condiciones de habitabilidad" y, también constituye maltrato, han añadido, que "el recibo de la luz se incremente para beneficio de un puñado de accionistas a costa del incremento exponencial de la pobreza energética".