La pandemia ha obligado a cambiarlo todo. En condiciones normales, Portugalete y Sestao River no se hubiesen jugado el ascenso a Segunda B en un duelo fraticida. Y en este partido clave, si todo fuese normal, ambos clubes hubiesen contado en el campo con el calor de su hinchada. Ayer era el día D para ambos clubes y, por extensión, para los dos municipios de Ezkerraldea. Las calles de Portugalete y Sestao se engalanaron con los colores aurinegros y verdinegros, respectivamente, pero, ni mucho menos, el ambiente era el de otros play-offs. La pandemia obliga a contenerse, y las fechas tampoco ayudan a caldear el ambiente.

24

Así se vivó el intenso Portugalete-Sestao River

En esta situación, ambas aficiones mostraron su mejor cara y trataron de seguir el partido sin aglomerarse. Por ello, el ambiente en los instantes previos al comienzo del encuentro era mucho más tranquilo de lo que sería en otras eliminatorias de ascenso de años precedentes. Algunos bares en los que se podía ver el partido iban tomando color según se acercaba el derbi para vivir casi dos horas de pasión, pero con mascarilla y guardando distancias. Fueron minutos de nervios, porque cualquier detalle podía decantar la balanza de un lado o del otro. Muestra de ese ambiente de pasión y nerviosismo fueron el bar El Córner de Sestao y el Bar Portu de Portugalete. En este último, la locura llegó en el minuto 84 con el gol de Rober que rubricaba el ascenso jarrillero y daba paso a una fiesta en la que la razón y la seguridad ganaron al corazón.