Jose María Arriola y Rosa Lerchundi son, probablemente, los mayores bibliófilos privados que han existido en el País Vasco. Desde hace más de seis décadas, este conocido notario vizcaino, ya jubilado, y su mujer han reunido una colección de unos 20.000 ejemplares impresos –entre ellos, 140 incunables–, además de 15.000 manuscritos, que conforman un extenso recorrido por el saber humano. Pero además de amar los libros, la pasión y dedicación del matrimonio Arriola-Lerchundi va acompañada del deseo de compartir

La actual exposición que presenta el museo bilbaino es una buena muestra de ello. El programa La Obra Invitada reúne en esta edición, que cumple 20 años desde la firma del convenio de colaboración con la Fundación Banco Santander, una selección de 40 manuscritos de la biblioteca Arriola-Lerchundi datados entre los siglos XII y XIX.

Escritos en euskera, la Virgen de Begoña, una biblia en euskera...

En la exposición se pueden encontrar ejemplares de distintas tipologías, desde los libros de horas hasta cartas de privilegio reales o ejecutorias de hidalguía. Junto a ellos destacan por su rareza una Biblia en euskera, una de las representaciones más antiguas de la Virgen de Begoña y escritos fundamentales en la historia del euskera, como las Cartas del Roncal (1616-1617), un intercambio de acuerdos entre Gabriel Etchart, representante de las autoridades francesas y Miguel Ros, del Valle del Roncal. También destacan por su interés historiográfico dos cartas de Francisco de Goya y una partitura de propia mano del compositor bilbaino Juan Crisóstomo de Arriaga.

El alcalde de Bilbao y presidente del Patronato de la Fundación Museo de Bellas Artes, Juan Mari Aburto, destacó que “se va a dar a conocer un tesoro oculto, una extraordinaria cámara de las maravillas bilbainas que son el conjunto de libros impresos de Arriola y Lerchundi. Su biblioteca custodia una cifra impresionante de libros y documentos, con el objetivo de poner a salvo del paso del tiempo el conocimiento que encierran estas preciosas caligrafías e ilustraciones que vamos a poder disfrutar”. 

Comisariada por José Luis Merino Gorospe, conservador de Arte Antiguo, la exposición se presenta acompañada por 11 pinturas, una escultura, una acuarela y dos fotografías, escogidas por su interés artístico y por la proximidad histórica o iconográfica con el contenido de los manuscritos. “La muestra supone una oportunidad para que la historia y el arte se vean frente a frente y en ese encuentro, la historia trascienda de alguna manera su tiempo al arte y el arte su verdad a la historia”, explicó Miguel Zugaza, director de la pinacoteca, durante la presentación de la muestra.

El origen de la colección

Jose Maria Arriola, que confesó estar muy orgulloso de la colaboración con el Ayuntamiento y el Bellas Artes de Bilbao, explicó el origen de la colección: “Muchos se preguntarán cómo se puede hacer esta colección. En Europa, cuando terminó la Guerra mundial, empezó una gran dispersión de grandes casas en el ámbito de la aristocracia y el de la alta burguesía, por lo que desde la segunda mitad del siglo XX hubo una grandes posibilidades de adquisiciones de estos manuscritos” ,explicó durante la presentación, a la que también asistió María Beguiristain, directora de Arte y Exposiciones de la Fundación Banco Santander.

“Cuando entras a la exposición sientes un gran impacto por los manuscritos que incluye”, expuso José Luis Merino. La muestra se puede ver hasta el 2 de febrero. La entrada es gratuita.