Bilbao - Belako concluyó la gira de presentación de su exitoso disco Render me numb, trivial violence (Primavera Sound) a finales de 2018, pero la banda de Mungia vuelve a la carretera y a ofrecer una serie de conciertos puntuales este verano, para “sobrevivir y poder grabar el próximo disco”, explican. Sus próximas fechas son el FIB de Benicàssim esta semana y dos citas vascas, el día 25 en el Wave Rave de Bermeo, junto a Crystal Fighters, en el anticipo al Bay of Biscay Festival, que cuenta con la colaboración de DEIA, y el 27, gratis, en el marco del Heineken Jazzaldia de Donostia.

¿Por qué han decidido abandonar el periodo de descanso y composición para volver a tocar aunque sean unas fechas contadas?

-No abandonamos ese periodo, lo compaginamos con estos conciertos, para sobrevivir y poder pagarnos el disco que queremos grabar.

¿Les resulta difícil abandonar el escenario aunque la última gira acabara a finales de 2018?

-Hemos tratado de seleccionar fechas muy concretas porque han surgido y nos parecían especiales, como el FIB, la Wave Rave en Bermeo, el Jazzaldia, el Noroeste, Tecate Coordenada en México, el Reading y el Leeds Festival... ¡A veces es muy difícil decir que no!

¿Podrían estos bolos servir para generar ideas o volver luego a trabajar con una nueva visión en las composiciones del próximo disco?

-En cierto modo sí, porque estando en periodo compositivo, no nos aguantamos y probamos algunos temas nuevos en directo, para ver cómo funcionan. O por lo menos en las pruebas de sonido, que también sirven. Así que girar entra a formar parte del proceso creativo también.

El FIB de Benicàsim siempre será especial para un grupo como Belako debido a su historia, imagino.

-Claro, las dos veces que hemos tocado nos han hecho sentir el crecimiento del grupo, de morir de calor a las 5.00 de la tarde a hacerlo a las 7.00 con más público, y que nos pudiese ver Melvin Benn (uno de los líderes de la industria musical británica) y entablar una amistad que nos ha llevado a tocar en Finsbury Park. También es de los pocos festivales en los que hemos podido disfrutar de conciertos las cuatro juntas y guardamos recuerdos muy buenos. Volvemos con muchísimas ganas.

¿Y las dos fechas vascas? Son en escenarios y contextos dispares.

-En principio solo iba a ser una, pero hace poco surgió el Heineken Jazzaldia y no pudimos negarnos. La Wave Rave es la fiesta de presentación de Crystal Fighters en Bermeo y vamos entre colegas como en su día a la Cave Rave en Zugarramurdi.

Habrá amistad con los británicos.

-Nos hace muchísima ilusión mantener esa amistad con ellos y que cuenten con nosotras en momentos tan especiales. Por otro lado, el Jazzaldia plantea un contexto musical muy distinto, abierto a todo el público que pueda haber en verano en la playa de Donostia, pero en un cartel distinto a los que solemos frecuentar, con una variedad brutal de propuestas y un espectro de público muy diverso. También tocamos en 2013, y fue un hito teniendo en cuenta nuestro corto recorrido, así que volver no será menos especial.

Es un espacio que acoge músicas muy diversas pero la mayoría marcadas por el virtuosismo. Ustedes son un grupo más de piel, de fiereza, especialmente en directo ¿no?

-Sí, en un escenario aportamos esa faceta más orgánica del grupo, somos más viscerales y vamos directas a la yugular del público. Pero con el tiempo, nuestros gustos eclécticos y la inquietud creativa, también compartimos facetas compositivas más elaboradas y complejas como los amigos del jazz o la clásica, aunque no entremos en el club.

Volviendo a Crystal Fighters. ¿Qué recuerdos guardan de aquella noche compartida en Zugarramurdi, cuando Belako daba casi sus primeros pasos?

-En esos primeros pasos ellos fueron una grandísima influencia. El álbum Star of love sigue siendo nuestro disco de cabecera y que el destino quisiese unirnos era difícil de creer. Lo vivimos así, medio incrédulas, pero en una nube. Sin mencionar lo brutal que fue tocar en las cuevas...

¿Se puede avanzar ya algo sobre el futuro disco, que será editado en 2020?

-No sabemos ni nosotras cómo será. Después de unas semanas intensivas de encierro lo tendremos más claro, pero la intención siempre será aportar cosas distintas y que los temas nuevos sean distintos entre sí. Esperamos que guste mucho. No lo sacaremos hasta que no nos encante.