Las persianas completamente bajadas y una simple hoja informativa pegada sobre una columna. Es lo que se van a encontrar quienes acudan, a partir de ahora, a la oficina de la Seguridad Social que funcionaba en un local de la calle Landako en la villa de Amurrio. La nota oficial, con los sellos del Ministerio de Inclusión Seguridad Social y Migraciones y de la Dirección Provincial de Araba del Instituto Nacional de la Seguridad Social, solo pone en conocimiento del cierre del centro y deriva a los usuarios al existente en la calle Viña Vieja de Laudio -eso sí, solicitando con antelación cita previa- o a realizar las gestiones a través de otros canales como el telefónico o la sede electrónica.
La primera crítica ante esta situación que, sin duda, va a suponer un inconveniente para quienes tienen que recurrir a este servicio, ha salido del grupo popular que ha calificado la medida como “un aprovechamiento de la pandemia del covid-19 para restringir o eliminar definitivamente servicios básicos en la zona rural”. En palabras de Montse Canive, “esta vez le ha tocado el turno a la oficina de la Seguridad Social, que permanece cerrada y parece que no tienen ninguna intención de volver a abrir, y esto supone que tenemos que desplazarnos a Laudio a realizar cualquier trámite y se encuentra saturado, las citas se demoran con el consiguiente trastorno para cualquier persona que deba realizar una gestión”.
Con la eliminación del servicio presencial en Amurrio trámites como la entrega de documentación y tramitación de la jubilación se pueden convertir en “un auténtico tormento para la población de los pueblos a los que ofrece servicio”, subraya Canive.
Importantes trámites
En esta la entidad se llevan a cabo gestiones administrativas de vital importancia como solicitar la jubilación, o las relacionados con la viudedad u orfandad en caso de fallecimiento de un familiar, la solicitud de la incapacidad temporal de una persona, bajas por maternidad, indemnizaciones por lesiones, prestaciones para familias numerosas o monoparentales y, además, este organismo se encarga del registro de Prestaciones Sociales Públicas.
Es por tanto, un servicio al que es habitual recurrir y que, en el caso de Amurrio, atiende a una población potencial de 12.000 habitantes más la de enclaves de menor entidad de la comarca que, a partir de ahora, se tendrán que desplazar hasta Laudio, a unos 13 kilómetros de distancia.
La popular Montse Canive afirma sobre el cierre de la oficina amurrioarra, que “nos dan explicaciones que no convencen a nadie”, pero su percepción es que se está aprovechando la pandemia y la crisis del covid-19 “para ahorrar costes y personal” mientras “la vida de los vecinos se va a hacer cada vez más complicada”. Esta nueva denuncia se suma a las ya efectuadas por parte del grupo del PP ante el cierre de sucursales bancarias de la comarca, o reducciones de horario y atención al público de diferentes servicios, que generan largas colas e inconvenientes a los usuarios. “No nos sirve la explicación de que es un asunto de riesgo por el covid, puesto que si existe en Amurrio, también existirá en los desplazamientos y con todos los usuarios concentrados en un mismo lugar”, insiste Canive.
