Antes de este verano el aeropuerto de Bilbao iniciará las obras de ampliación de la zona de embarque de la planta 1 de la terminal de Loiu, el nivel a ras de pista desde el que las aerolíneas que operan en remoto recogen y dejan a sus clientes en los autobuses que conectan con los aviones.

Una ampliación necesaria por las apreturas continuas que sufren los viajeros que tienen que embarcar por esta vía sobre todo en la época de verano, donde algunos días las aglomeraciones son de calado.

Aena, el gestor de quien depende el aeropuerto de Bilbao, ha adjudicado las obras por un montante de 2,5 millones, medio millón menos del importe bruto por el que salió la licitación.

Con la adjudicación del contrato, las obras podrían empezar en un par de meses con lo que, tras ocho meses de trabajos a los que se ha comprometido la empresa adjudicataria, los nuevos espacios estarán disponibles para las primeras semanas del próximo año.

En realidad, estas obras son la culminación de la remodelación de esta zona de embarque situada a la misma altura de las pistas iniciada por el aeropuerto cuando se trasladó el personal de la terminal aérea al nuevo edificio técnico, dejando libres las oficinas y espacios de almacenaje que ocupaban todo este frente de la terminal.

Entonces se habilitaron en 1.400 metros cuadrados de superficie espacios de espera para pasajeros y mostradores de identificación para operar a través de puertas de embarque, C21, C22, C23 y C24, en el lado derecho y las D31, D32, D33 y D34, en el izquierdo.

Con las obras a acometer se va a ampliar el espacio público disponible siendo la principal novedad el traslado a esta planta inferior de la puerta de embarque B17 que hoy ofrece servicio en el nivel superior.

En este lateral de la terminal se remodelará la zona donde el Cuerpo de Policía Nacional guarda los pasajeros retenidos y los asilados parte de cuya superficie actual pasa a habilitarse como almacenes para la sala VIP ubicada en la planta superior y espacio para una tienda de duty free. También se abrirá a los viajeros unos aseos que ahora se encuentra cerrados.

En los dos extremos

En el otro extremo de la terminal se actuará en la zona de oficinas existente para incorporarla al área de embarque contigua y darle más amplitud para los pasajeros en espera. También se incluirá unos nuevos servicios para hombres y mujeres. Así mismo, el núcleo de urinarios existente en la actualidad se incrementará para añadir una nueva sala de lactancia para infante.

Las obras también incluyen una remodelación parcial de la segunda planta redistribuyendo las oficinas de diferentes servicios de AENA que sumarán un ascensor en la zona central de la misma para conectarse con el nivel inferior.

Según indican fuentes del gestor aeroportuario en Bilbao, “las actuaciones permitirán aumentar la capacidad del edificio terminal” con lo que se conseguirá “atender la demanda de tráfico con un buen nivel de calidad”.

Esta ampliación permitirá que, en caso de necesidad y de saturación de las seis pasarelas directas sitas en la planta 2 de la terminal a los aviones, se pueda operar desde las puertas de embarque inferiores.

Al detalle

Presupuesto 2,6 millones de euros para asumir la obra

Aena, el gestor aeroportuario estatal de quien depende las instalaciones de la terminal de Loiu, ha adjudicado los trabajos por un coste de algo más de 2,5 millones de euros, IVA incluido, una cantidad que supone casi medio millón menos del importe bruto por el que se licitaron.

Más baños y espacios

Se añade una sala de lactancia

Las obras, además de generar más espacio de espera para los viajeros antes de coger el autobús camino del avión, incorpora nuevos urinarios, una tienda de duty free y una sala de lactancia para las madres con niños que vayan a volar.