El colectivo de farmacéuticos está molesto. Las declaraciones realizadas por parte del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, indignaron a estos profesionales sanitarios que trabajan en primera línea en estos complicados momentos. En opinión de Simón, el riesgo de transmisión a los farmacéuticos “debería ser mínimo” si se mantienen las medidas de precaución de mantener un metro de distancia y pagar por medios sin contacto. Sin embargo, el colectivo de farmacéuticos no comparte esta afirmación: “Sabemos que uno de los riesgos que corremos los profesionales sanitarios es contagiarnos y lo asumimos, pero no somos unos inconscientes, debemos ir protegidos”, aclara el director del Colegio de Farmacéuticos de Bizkaia, Juan del Arco.

Este malestar del colectivo de farmacéutico surgió después de que el Ministerio de Sanidad rechazara reforzar la protección a las oficinas de farmacia en plena crisis del coronavirus y a tenor de los recursos disponibles porque, en palabras del director del Centro de Coordinación de Emergencias y Alertas Sanitarias, “son los riesgos propios de su profesión”.

Sin embargo, estas palabras encendieron a los profesionales que trabajan en las farmacias y que a diario atienden a miles de personas. “Los farmacéuticos somos profesionales sanitarios, formamos parte del Sistema Nacional de Salud y prestamos un servicio básico a la población para garantizar el acceso de la población a la medicación”, afirma Del Arco.

El director del Colegio de Farmacéuticos de Bizkaia no cuestiona las restricciones marcadas por parte del Ministerio de Sanidad, pero insiste en la importancia de proteger a los profesionales sanitarios que trabajan a diario de cara al público. “Están atendiendo a los pacientes y es fundamental protegerles en la medida de lo posible. Todos los días están en contacto directo con pacientes”.

Hasta la fecha, según explicó a DEIA Del Arco, no se ha distribuido material para la protección de este colectivo ante el covid-19. “Somos conscientes de las limitaciones, pero necesitamos protección”, insiste. Por eso, y sin ánimo de polemizar más sobre estas declaraciones, Juan del Arco aprovechó la ocasión para pedir a las autoridades sanitarias y políticas que no se olviden y cuenten con los farmacéuticos a la hora de distribuir mascarillas, guantes, protectores oculares, batas impermeables, entre otras medidas de protección, si no quieren ver cómo “las farmacias comienzan a cerrar como consecuencia del coronavirus”, afirma.

Desde hace semanas, el ritmo de trabajo es frenético en las farmacias. La gente no solo acude a comprar medicamentos sino también a aclarar dudas relacionadas con el covid-19. Y ese ritmo no cambiará en los próximos días. Con esta realidad, el colectivo de profesionales farmacéuticos asegura que seguirá en primera línea de asistencia a toda la población en esta crisis y, siempre, “garantizando una continuidad asistencial 365 días al año, 24 horas al día”. Por ese motivo, se ponen a disposición de las autoridades sanitarias para seguir asistiendo a una población que sufre la mayor crisis de salud conocida en el último siglo y que merece que todos los sanitarios y las Administraciones trabajen sin descanso y en coordinación.