No todos los días una ciudad estrena una conexión aérea transatlántica con Estados Unidos. Por eso, este próximo domingo 1 de junio, algo más de una semana, el aeropuerto de Bilbao, United Airlines (UA), la compañía que gestionará el enlace, y el comité de rutas de Bizkaia echarán el resto para que la inauguración del vuelo deje huella para la historia aeronáutica local.
Y ello a pesar del escaso tiempo que se va a tener, apenas dos horas, entre que aterrice el vuelo procedente del aeropuerto neoyorquino de Newark, a las 10.45 horas y despegue el mismo avión de Bilbao a las 12.30 horas.
Según ha podido saber DEIA entre los diferentes actores implicados en los actos, todo comenzará con la llegada del vuelo UA633 a la mencionada hora a las pistas de Loiu desde donde se dirigirá al finger o pasarela de acceso directo con la terminal. En concreto, se utilizará la puerta B16, la prevista para los pasajeros que llegan a Bilbao desde aeropuertos fuera del acuerdo Schengen y que tienen que pasar el control de pasaportes.
Poco después de que los primeros pasajeros procedentes de la gran manzana desembarquen, se efectuará un primer acto al lado del avión a donde se permitirá pasar a los fotógrafos y cámaras de televisión para tomar una imagen de la tripulación y los responsables de United Airlines que han posibilitado el vuelo. Será una instantánea similar a la tomada hace dos años cuando la compañía norteamericana estrenó la ruta de Nueva York a Málaga.
Autoridades presentes
Posteriormente, los protagonistas se dirigirán a la zona pública de Llegadas, en la parte inferior de la terminal, donde serán recibidos por el director del aeropuerto de Bilbao, Iván Grande y diversas autoridades locales barajándose la presencia de la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe, aunque a día de hoy está por confirmar su asistencia. Todavía no se ha cerrado el listado de invitados al acto aunque por parte de la aerolínea estará seguro el director de ventas en UA para Europa central, España y Portugal, Guido Aráujo.
Los máximos responsables implicados en que después de 20 años de intentonas La Paloma ofrezca un vuelo directo con Nueva York tendrán unos minutos para valorar esta conexión aérea para Bilbao, Bizkaia y toda su zona de influencia en el norte de la península para después pasar a cortar una tarta que se repartirá entre los presentes.
Ni Aena, como sociedad responsable del aeropuerto, ni la compañía áerea, ni el comité de rutas, que con Bilbao Air han peleado por conseguir esta conexión, han querido olvidarse de los verdaderos protagonistas del vuelo, los viajeros.
A todos ellos, tanto los que lleguen de Estados Unidos como los que despeguen desde La Paloma se les hará entrega antes de embarcar de un diploma o certificado personal de cómo han viajado en el vuelo inaugural de la ruta Bilbao-Nueva York.
Mientras todo ello ocurre, el avión Boeing 757-200 que cubrirá la ruta tiene durante todo el verano estará siendo atendido por el servicio de handling para llevar el equipaje a la bodega, limpiar la cabina, llenar los depósitos de combustible y subir a bordo el catering.
Poco después embarcará el pasaje para ocupar los 176 asientos que oferta UA en tres categorías diferentes. La más costosa y cómoda es la clase Solaris con 16 camas en business, 42 asientos Economy Plus con más espacio para las piernas y para guardar las pertenencias y 160 en clase Economy.
A día de ayer, fuentes de la aerolínea indicaron que “la ocupación de ambos vuelos inaugurales es muy buena igual que el número de reservas para todo el verano”.