La cuesta de enero del Athletic será larga y a distancia

Enero le llega al Athletic como la oportunidad de mitigar el pasado más reciente. Como la ocasión temporalmente perfecta para intentar un nuevo comienzo, aunque los resultados pretéritos no se puedan borrar. Porque el 2025 competitivo no terminó del todo bien para unos leones que, tras dos buenos encuentros frente a Atlético de Madrid y PSG, encadenaron aciagos tropiezos ante Celta y Espanyol y, en medio de ellos, tuvieron que llegar hasta la prórroga para descomponer a un Ourense de Primera RFEF.

Así que diciembre, y con él el año, se marcha dejando a los rojiblancos en octavos de Copa, pero encallados en una dinámica peligrosa, a cinco puntos de los puestos europeos y con el agua al cuello en la Champions. Es decir, con la necesidad de espabilar ya. Sin embargo, el inicio de 2026 no será sencillo para el Athletic. De hecho, enero será un mes duro e interminable en el que los de Ernesto Valverde disputarán hasta cuatro competiciones.

Serán siete encuentros, ocho si los rojiblancos llegan a la final de la Supercopa, en apenas 26 días. Y de los cuales tan solo dos se disputarán en San Mamés. Será una cuesta interminable, una auténtica rompepiernas, que no solo deberá servir para que el Athletic redireccione el rumbo que perdió tras el verano; sino que también condicionará los objetivos a los que podrán aspirar los leones a final de temporada.

Todo comenzará con la visita del próximo sábado (16.15 horas) a Osasuna. El Sadar es un estadio que históricamente se le ha dado bien al Athletic, de hecho allí ganó en las dos últimas temporadas; sin embargo, este fin de semana se juntarán en Iruñea unos leones con necesidad de voltear su situación con unos rojillos que, a diferencia de su rival, sí que despidieron 2025 con un grandísimo sabor de boca. Con una goleada al Alavés (3-0) ante su gente.

La Supercopa: uno o dos partidos

Después de ello será el turno de la Supercopa. Los de Valverde viajarán a Arabia Saudí para disputar una competición que resulta baladí desde que se juega tan lejos de casa, pero que deja un buen dinero en las arcas rojiblancas. Así, los leones se medirán al Barcelona en la semifinal del miércoles 7 (20.00 horas) y, de ganar a unos culés que les tienen ganas, jugarán la final ante Real Madrid o Atlético el domingo 11.

Sin tiempo para digerir lo que ocurra en Yeda, el Athletic tendrá que centrarse en la Copa. Porque los octavos de final de su competición fetiche se desarrollarán el 13, 14 ó 15 de enero. Cabe destacar que los leones aún desconocen su rival para esta eliminatoria ya que aún no ha tenido lugar el sorteo –será el día 7–, pero lo que sí es impepinable es que el encuentro será de nuevo a domicilio y ante un equipo de Segunda División. Así, las visitas a El Sardinero o a Riazor se barruntan como las más complicadas.

Tras los octavos de Copa, enero llegaría a su ecuador; pero sin tiempo para descansar, los de Valverde tendrán que afrontar una nueva jornada liguera: la visita a Son Moix. Allí espera el sábado 17 (16.15 horas) el Mallorca de Jagoba Arrasate para dar el pistoletazo de salida a la segunda vuelta.

El regreso de la Champions League

Cuatro días después aparecerá en la cuesta de enero la cuarta y última competición a la que el Athletic debe hacer frente esta temporada: la Champions. El torneo de las estrellas regresará al calendario rojiblanco el miércoles 21 con la exigente y definitoria visita a Bérgamo. Y es que ante el Atalanta, que es la revelación del torneo, es imperativo ganar si se quiere llegar a la última jornada de la Fase Liga con opciones de seguir con vida.

Así, lo que ocurra en el Gewiss Stadium será determinante para el último encuentro de Champions frente al Sporting de Portugal (miércoles 28) puesto que puede que en esta último partido, los de Valverde tan solo se jueguen la honra. Con todo, antes de ello, el fin de semana del 25 de enero, con la fecha y el horario aún por determinar, San Mamés volverá a abrirse 34 días después para recibir al Sevilla en liga.