El fichaje de Aymeric Laporte por el Athletic no solo era ilusionante para la afición, sino también necesario para el equipo. Sin embargo ahora, a la espera de que se solucione el problema de la inscripción del francés de forma favorable o hasta la apertura del mercado invernal, Ernesto Valverde tan solo podrá contar con dos centrales del primer equipo: Dani Vivian y Aitor Paredes.
Una situación nefasta para el club rojiblanco, que esta temporada afronta cuatro competiciones –Liga, Champions League, Copa y Supercopa– y que hasta enero tendrá que disputar 20 encuentros (14 de liga y 6 de Europa) sin contar con el de mañana ante Osasuna en Lasesarre con motivo de la Euskal Herria Txapela. Por ello, todo parece indicar que Txingurri tendrá que seguir metiendo en las convocatorias al cachorro Jon de Luis. El joven central ya ha estado en las listas de las tres primeras jornadas de liga, aunque por el momento todavía no ha tenido la oportunidad de debutar. Sin embargo, todo parece indicar que Valverde tendrá que contar con él para las rotaciones y para dar descanso a un Vivian y a un Paredes que se han quedado solos ante el peligro. Porque Yuri y Lekue son unos parches que el técnico prefiere no tener que usar.
Falta de centrales
Y es que el problema de los centrales ya es algo que puso en la mesa Valverde la temporada pasada. Al técnico rojiblanco le urgía el fichaje de un futbolista en esa demarcación, más si cabe después de que finalizara la cesión de Unai Núñez.
Pero es la urgencia se ha convertido en necesidad puesto que la zaga del Athletic perdió casi a la vez a dos hombres: Yeray Álvarez y Unai Egiluz. El primero se encuentra a la espera de conocer la sentencia de la UEFA tras dar positivo en el control antidopaje que se le realizó en la semifinal de la Europa League ante el Manchester United. Por el momento, el barakaldarra está suspendido, por lo que no puede ni entrenar en las instalaciones del Athletic ni con sus compañeros. Mientras, Egiluz, al que se renovó esta temporada con el objetivo de que supliera a Yeray, tuvo que pasar por el quirófano tras la rotura de ligamento cruzado de su rodilla derecha y se perderá toda la temporada.
