De la celebración protagonizada por los tripulantes de la gabarra de 1984 podría quedar solo la memoria; y bueno, una gabarra que al poder ser restaurada no sufre por igual los achaques del transcurso del tiempo. Porque cuarenta años son muchos para cualquier entidad, que bien podría haber renovado todos sus rostros. Sin embargo, en el fútbol la longevidad puede resultar asombrosa. Y concretamente en el Athletic. Mañana habrá dos personas que cuarenta años después navegarán de nuevo sobre la plataforma acondicionada para la celebración de los éxitos deportivos del club bilbaino. Se trata de José Ángel Iribar y de Jon Aspiazu, unos privilegiados, como el propio dato demuestra.
Ambos estuvieron aquel histórico 7 de mayo del 1984 a bordo de la embarcación rebautizada como Athletic y volverán a surcar la ría del Nervión como miembros del club, porque así lo confirmó el presidente, Jon Uriarte, durante la visita a la Casa de Juntas de Gernika. “Van a repetir ese hito”, pronunció el máximo responsable.
Iribar montó en aquella ocasión en calidad de entrenador del Bilbao Athletic, al que dirigió entre 1982 y 1987, una responsabilidad que asumió después de colgar los guantes en 1980 tras permanecer durante 18 temporadas defendiendo la portería.
Aspiazu, que militó en el Bilbao Athletic de Iribar, tuvo la fortuna de ser incluido en la celebración del 84, que era el segundo paseo del Athletic por la ría a bordo de la gabarra, pese a que aún no había debutado como jugador del primer equipo, lo que haría solo unos días después, concretamente el 19 de mayo; fue su única temporada enrolado en las filas del Athletic, con el que llegó a disputar dos partidos oficiales. En la campaña posterior, Aspiazu continuaría su carrera deportiva en el Hércules para después recalar en el Sestao, el Deportivo, el Sestao de nuevo y poner fin a su trayectoria como futbolista en el Amurrio, tras lo cual pasó a ejercer como entrenador.
En la actualidad, Iribar, que ostenta el récord histórico de 614 partidos con la camiseta del Athletic, ejerce como embajador del club, condición que le brindará la oportunidad de volver a pisar la gabarra en plena celebración del vigésimo quinto título de Copa del Athletic. Anecdóticamente, lo hará solo unos pocos meses después de que se haya inaugurado una estatua en su honor en la explanada de San Mamés.
Mientras, Aspiazu repetirá el viaje en la gabarra gracias a su cargo de segundo entrenador. La mano derecha de Ernesto Valverde se reincorporó al club bilbaino en 2001, cuando empezó a ejercer de ojeador. Más tarde se convertiría en ayudante de Valverde, con quien ha estado en los banquillos de Bilbao Athletic, Espanyol, Olympiacos –en dos etapas–, Valencia y Athletic, donde cumple su tercera etapa como técnico.
