EL Athletic defenderá su condición de vigente campeón de la Supercopa en Arabia Saudí, país asiático con monarquía absoluta hacia el que ponen rumbo hoy martes los leones en vuelo chárter a las 13.00 horas desde el aeropuerto de Loiu. Una vez completado el viaje hasta Riad, la capital, con la llegada prevista a las 21.30 horas local (19.30 en Bilbao), los de Marcelino García Toral, que se medirán el jueves al Atlético en la segunda semifinal del torneo a partir de las 20.00 horas, apenas tendrán contacto con el exterior. La burbuja aeropuerto-hotel-entrenamiento-partido marcará el día a día de los rojiblancos debido al creciente impacto del coronavirus en el territorio, donde a falta de derechos e igualdad entre las personas se han reforzado recientemente las medidas de seguridad para contener la propagación de ómicron.

Es por ello que Arabia Saudí, situado en el puesto número 125 del ranking, pero que ya albergó la Supercopa en 2020 y que repetirá hasta, mínimo, 2029 como consecuencia del afán recaudatorio de una Federación Española de Fútbol que se embolsa 40 millones de euros por cada edición, exige la vacunación completa para todo aquel que quiera acceder al país. Con la obligación de usar la mascarilla en interiores y en exteriores, el país árabe extrema las precauciones mientras destina miles de millones de dólares para intentar mejorar su imagen ante el mundo. La realidad, sin embargo, es que los derechos humanos brillan allí por su ausencia mientras se discrimina a la mujer y se castiga la homosexualidad bajo la acusación de ser "uno de los crímenes más atroces y abominables", según recalcó recientemente Abdelaziz Al-Sheikh, máxima autoridad religiosa del reino saudita.

A pesar de que en los últimos años el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, ha aplicado una política de apertura social y económica, lo cierto es que las ONG siguen poniendo el foco en las violaciones a los derechos humanos que se perpetran cotidianamente en un país en el que hasta cuarenta personas fueron ejecutadas entre enero y julio de 2021, más que durante todo el año anterior, según denunció Amnistía Internacional. Las condenas a muerte, a ojos del grupo de derechos humanos, se dictaron después de juicios manifiestamente injustos y empañados por denuncias de torturas durante las detenciones preventivas.

EL ESCENARIO

Las autoridades saudíes, además, sufren un grave problema de imagen desde el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en 2018. De él intentan desprenderse, al mismo tiempo que lideran un sistema represivo por el cual ser mujer conlleva vivir bajo un sistema de tutela masculina que controla y limita su libertad y autonomía personal. Se trata, así las cosas, de un destino que asoma bajo la lupa internacional y en el cual aterrizará esta misma noche el Athletic, que en el plano deportivo buscará el jueves el billete para la final de la Supercopa ante el Atlético en el King Fahd Stadium de Riad, con capacidad para 68.752 aficionados y sede también de la otra semifinal que enfrentará a Real Madrid y Barcelona, así como de la final que intentarán alcanzar los leones con un puñado de aficionados en las gradas como consecuencia del elevado precio del viaje y de las restricciones.