El Athletic, que suma la friolera de diecisiete apariciones ligueras consecutivas sin ganar en el Camp Nou, con un saldo de catorce derrotas y tres empates, el último la pasada temporada (1-1), visita el templo de Leo Messi, acostumbrado a erigirse en una insorteable pesadilla para todos sus rivales. No se conoce kryptonita alguna contra el argentino, autor de 26 goles en los 34 partidos oficiales que ha disputado esta temporada, con 21 tantos en 25 choques de liga que le sirven para asomar como máximo goleador del campeonato. El conjunto roijblanco, además, asoma como la sexta víctima favorita del 10 blaugrana, que colecciona un total de 24 dianas en sus 36 enfrentamientos con los leones, con una media de 0,6 goles por partido. Solo Sevilla (37), Atlético (31), Valencia (28), Real Madrid (26) y Espanyol (25) han sido más castigados que el Athletic por parte de un futbolista que se estrenó con gol frente a los bilbainos hace ya catorce años.

¿CAMBIO DE TENDENCIA?

Corría el 15 de enero de 2006, la decimonovena jornada de liga, cuando el de Rosario perforó por primera vez las redes rojiblancas con un gol que sirvió al Barcelona para sacar adelante la cita por 2-1. Los últimos antecedentes, sin embargo, conceden cierta sensación de alivio y optimismo a los pupilos de Gaizka Garitano, pues han sido capaces de apartar del gol a Messi en los tres últimos envites, con dos empates y una victoria para los rojiblancos, el cuarto rival contra el que más veces se ha vestido de corto un gigante del balón que, eso sí, no marca a los leones desde el 18 de marzo de 2018 en un triunfo culé en liga por 2-0.