BILBAO. Ante la posibilidad de que se hubiera producido una compra-venta de droga, ertzainas del dispositivo interceptaron al supuesto comprador una vez en el exterior. Tras identificarle, este explicó que había adquirido un trozo hachís, que era incautado por los agentes.

Por todo ello, los ertzainas identificaron en el bar al responsable en esos momentos y realizaron una inspección localizando en la cocina escondidos en una lata de refresco tres trozos de hachís así como una libreta con anotaciones.

Los ertzainas procedieron a la detención del responsable del bar, un varón de 37 años de edad, acusado de un delito de tráfico de drogas.