El secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, ha apostado por "una escuela intercultural y plurilingüe" y ha defendido que la tarea de recuperación del euskera "no puede circunscribirse exclusivamente a la escuela, doblando ahora sus compromisos porque no estamos satisfechos con los resultados 40 años después". "El problema no está en el conocimiento sino en el uso", ha añadido.

El dirigente socialista ha intervenido en la jornada 'Un sistema educativo de futuro. Euskal Hezkuntzarentzat bide berria' que se desarrolla este sábado en Bilbao y que cuenta con la presencia de la secretaria de Educación y Formación Profesional del PSOE, Mari Luz Martínez Seijo.

En la inauguración de la cita, Andueza ha resaltado que la educación es, para los socialistas, "uno de los elementos centrales de reflexión en el proyecto de construcción de una sociedad más libre, más justa y equitativa, así como una piedra angular del ideario de la socialdemocracia en Europa".

"Una educación desigual es una mala inversión para cualquier sociedad. Supone no dar oportunidad a que se desarrolle todo el talento y la capacidad creativa de las nuevas generaciones y es especialmente costoso en una sociedad pequeña como la vasca", ha alertado, para añadir que no se puede concebir un futuro de progreso y bienestar para Euskadi sin un sistema educativo que garantice una educación "de calidad y universal".

Tras ensalzar la labor de los socialistas en el impulso a la educación tanto en Euskadi como en España, ha destacado la aprobación de la Lomloe, impulsada por la ministra Isabel Celaá, y ha recordado también la Ley de la Escuela Pública Vasca, "cuyos artífices fueron dos socialistas, José Ramón Recalde y Fernando Buesa, y que ha constituido el marco propio de desarrollo de nuestro sistema educativo en los últimos 30 años".

Necesidad de una nueva ley educativa vasca

No obstante, ha advertido que para garantizar la igualdad de oportunidades, es necesario emprender una "reforma profunda de nuestro sistema educativo y dotarnos de una nueva ley educativa en Euskadi".

En este contexto, ha destacado el acuerdo alcanzado entre diferentes fuerzas políticas del Parlamento Vasco en torno al acuerdo de bases para la nueva Ley Educativa Vasca y ha sostenido que "ahora toca que este acuerdo tenga reflejo en el nuevo desarrollo normativo del sistema educativo vasco".

"Y no hablamos solo de la elaboración de una nueva Ley vasca de Educación, sino de todo el desarrollo de decretos, alguno de los cuales tiene un papel decisivo en la configuración del sistema. Por ejemplo, el decreto de ordenación y planificación de la red de centros docentes de enseñanza no universitaria", ha expresado, para añadir que los socialistas no comparten algunos de sus contenidos.

Según ha manifestado, las bases para el acuerdo no eran el final de nada, sino "el comienzo de un largo proceso en el que nos jugamos mucho como sociedad". "Tenemos toda la disposición del mundo para escuchar y colaborar con los agentes de la comunidad educativa. Toda la disposición para seguir trabajando en este proceso. Creemos en el consenso", ha añadido.

Objetivos de la nueva ley

A su juicio, el objetivo de la futura ley debe ser garantizar una educación "equitativa y de calidad para todos". Así, ha afirmado que la reforma del sistema educativo debe evitar la configuración de un sistema educativo dual. "Un sistema educativo diferente en su acceso y en sus resultados, en función de la condición social", ha expresado.

Tal y como ha concretado, esto no se reduce a un conflicto entre educación pública y concertada, aunque "la apuesta por un sistema educativo como factor de cohesión social y superador de desigualdades debe partir de la escuela pública como eje central del sistema".

Por otro lado, ha advertido de que la sociedad es cada "más diversa" y por ello es necesario "una escuela intercultural y plurilingüe".

"Debemos cuestionarnos la viabilidad de un modelo monolingüe, porque no responde ni responderá a las características de la sociedad vasca de este siglo. La apuesta que hicimos hace 40 años por extender el conocimiento del euskera y por promover una sociedad bilingüe sigue siendo válida, pero no puede ser ajena a la experiencia acumulada y a la realidad que enfrenta", ha considerado.

En este sentido, ha defendido que la tarea de recuperación del euskera "no puede circunscribirse exclusivamente a la escuela, doblando ahora sus compromisos porque no estamos satisfechos con los resultados 40 años después".

"El problema no está en el conocimiento sino en el uso. No queremos que los colegios sean islas lingüísticas cada vez más diferenciadas de su entorno. Sobre todo, cuando ese entorno se dirige hacia una mayor diversidad lingüística", ha detallado.

Por último, ha sostenido que el objetivo de la reforma educativa debe ser asegurar el éxito escolar todo el alumnado, lo que pasa por la capacidad para "adaptar las cosas aprendidas a una realidad cambiante, pero también por una efectiva evaluación de los resultados y los rendimientos del sistema".

"Y por otras cuestiones como la puesta en valor de la carrera docente, la asignación de recursos a los centros, la autonomía de gestión o la participación de la comunidad educativa", ha finalizado.